Agustín Molina García. Profesor de la Universidad Politécnica de Madrid y director del Proyecto SAGITAL
El sector pesquero artesanal vive desde hace años una profunda crisis motivada por diversas causas. La sobreexplotación de caladeros, la limitación de artes de capturas, el aumento del coste del combustible, el estancamiento del precio de venta de los productos, etc., abocan a la pesca artesanal a una progresiva pérdida de rentabilidad que pone en cuestión su supervivencia. Esta situación se plasma de forma evidente en el puerto de Almería, el más importante de la provincia y el sexto de la Comunidad Autónoma de Andalucía, que en los últimos 20 años ha reducido su flota pesquera en un 30% y ha perdido más del 50% del empleo directo.
Sin embargo, para los poco más de 60 barcos de pesca censados en este puerto se abre una ventana de oportunidades gracias al Turismo Pesquero, que sirve para difundir y valorizar la cultura de la pesca, sus tradiciones y sus productos. Comprende actividades como visitas guiadas al puerto para descubrir cómo se preparan las artes y los barcos, o a la lonja para ver cómo se subasta el pescado. También se incluyen otras actividades de tipo más comercial como las tiendas del mar, donde se venden artículos náuticos y marineros, y por supuesto establecimientos para la venta y degustación de los productos del mar o incluso alojamientos en casas de pescadores. Pero sin duda la actividad de Turismo Pesquero más relevante es la Pesca-turismo, que consiste en la realización de salidas a bordo de barcos pesqueros para observar el trabajo de los pescadores.Los beneficios de esta actividad no son solo económicos (como referencia, las experiencias de Pesca-turismo realizadas en Cataluña y Baleares están aportando ingresos que oscilan entre los 60 € y los 190 € por turista embarcado); también se producen beneficios ambientales, ya que al tener las salidas de pesca un carácter demostrativo se reducen el esfuerzo pesquero y el consumo de combustible.
La regulación de la Pesca-turismo se ha producido el pasado mes de abril con la aprobación del Real Decreto 239/2019 que completa el compromiso establecido en la modificación de 2014 de la Ley de Pesca Marítima del Estado, que incorpora el Turismo Pesquero como la primera línea de diversificación dirigida a mejorar los ingresos de los pescadores y estimular la revitalización de las zonas costeras.
La aprobación de este Real Decreto culmina un proceso normativo que comenzó en 2007 tras la “Declaración de Lanzarote”, que recoge las conclusiones del Proyecto SAGITAL (2004-2007) sobre Pesca-turismo. En este proceso fue decisiva la participación del presidente de la Autoridad Portuaria de Almería, Jesús Caicedo, al presentar en junio de 2013 en el Congreso, como diputado por Almería del Grupo Parlamentario Popular, una Proposición no de Ley relativa al impulso de la Pesca-turismo, que permitió la inclusión de estas actividades en la mencionada revisión de la Ley de Pesca Marítima.
No obstante, la puesta en marcha de estas actividades requiere del apoyo de las administraciones.En esta línea, la Autoridad Portuaria de Almería tiene aprobada una inversión de más de un millón de euros dirigida a la recuperación del edificio de la antigua Lonja del Pescado, a la creación de un centro para la comercialización de segundas ventas de productos pesqueros y a la mejora de la zona de desembarco y fondeadero de pequeñas embarcaciones pesqueras. Igualmente, la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible está elaborando un decreto para regular y fomentar la Pesca-turismo en Andalucía, consciente de que una oferta coordinada de actividades turístico-pesqueras es una interesante alternativa para el sector.
En definitiva, la oportunidad está clara. Estas actividades novedosas junto con el impulso institucional posibilitan a los pescadores almerienses avanzar hacia una pesca económica, ambiental y socialmente sostenible, que sirva para mejorar sus rentas, valorizar su actividad y reforzar la vinculación del puerto pesquero con la ciudad y con los turistas que la vistan.
Agustín Molina García. Profesor de la Universidad Politécnica de Madrid y director del Proyecto SAGITAL
