La Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía ha informado favorablemente respecto a la intervención mediante sondeo y control arqueológico de movimientos de tierra, con motivo del proyecto de conservación del Bien de Interés Cultural (BIC) “Arco Miliario de Augusto” en Mengíbar (Jaén).
El proyecto está promovido por el Ayuntamiento de Mengíbar y va a permitir documentar la relación arqueológica de la cimentación del arco con el subsuelo, protegerlo y salvaguardar la calzada romana.
La solicitud tuvo entrada en la delegación territorial con fecha 16 de junio de 2020 y contempla los trabajos arqueológicos necesarios ante el inminente peligro de destrucción que sufre una gran estructura arqueológica que ha quedado parcialmente descubierta sobre la actual vía pecuaria denominada “Camino de los Romanos”, situada en el término municipal de Mengíbar, con evidente riesgo de caída sobre el camino.
“Se trata de unos restos arqueológicos de gran importancia para la provincia y para Andalucía. El pasado año, el Gobierno andaluz aprobó su catalogación como BIC. Ahora damos una respuesta ágil a la solicitud del Ayuntamiento para intervenir en aras a su protección” destaca el delegado territorial, Jesús Estrella.
Arco miliario de Augusto
El Arco miliario de Augusto se incluyó en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz el 29 de abril de 2019, con la consideración de Bien de Interés Cultural. El basamento del Arco de Augusto en Mengíbar, punto de inicio de la Vía de Augusto en la Bética, es un marcador territorial de primer orden, como punto desde el cual se medían las distancias de la vía en todos los miliarios andaluces, y que separaba la provincia senatorial de la imperial. Aunque sus restos no eran reconocidos como vestigios arqueológicos, la intervención arqueológica de 2018-2019 probó que son las cimentaciones del arco, ahora muy evidentes. Los límites de la nueva provincia Bética se fijaron en el Guadalquivir y, como hoy, se marcaban sobre la vía de acceso. Por ello, la principal calzada de Hispania, la Vía Augusta, fue el lugar idóneo para emplazar el Ianus, un arco situado en el inicio de la Bética, provincia senatorial, separándola de la provincia imperial Tarraconense, a la que Augusto unió, entre otros, el colindante distrito de Cástulo con sus riquísimas minas de plata.
El objetivo de esta obra es documentar toda relación arqueológica entre la cimentación occidental del arco y el subsuelo, así como la zona de la calzada romana. La calzada presenta una erosión acuciante, debido a su continua afectación medioambiental y climática, así como por el efecto de las correntías de agua, una situación que es primordial subsanar con una conducción que contenga las aguas, evite mayor erosión al material arqueológico y, por tanto, reconduzca dicha afectación. Además, dicha intervención servirá para la colocación del vallado necesario, no solo para su delimitación, también como base para la realización del parapeto de soporte de la estructura arqueológica.
La Comisión Provincial de Patrimonio Histórico, en sesión celebrada en el día 1 de julio de 2020, dictaminó favorablemente al considerar que la intervención contaba con un planteamiento metodológico acorde, una dirección solvente y un presupuesto suficiente.