Las llamadas al teléfono de emergencias 112 se convierten en una fuente de información de gran valor para los especialistas. Los datos recogidos en estas llamadas son una oportunidad para el diseño de estrategias para la gestión del riesgo de inundaciones, así como para realizar una planificación más eficaz de los medios de emergencia, según se describe en una investigación de la Universidad de Alicante (UA).
La investigación, publicada en revista sobre desastres naturales mejor indexada del mundo, International Journal of Disaster Risk Reduction, analiza las llamadas recibidas por el servicio 112 de la Generalitat Valenciana durante el evento de inundación de 2019 en la comarca de la Vega Baja, considerado el episodio de este tipo más costoso de la historia española.
Por qué las llamadas al 112 ayudan a mejorar la gestión del riesgo de inundación
Las llamadas al 112 ayudan a mejorar la gestión del riesgo de inundación porque de su análisis se obtiene una imagen más fidedigna las necesidades y emergencias experimentadas por la población durante la inundación, así como las zonas más afectadas.
Los investigadores de la UA han analizado más de 4.000 llamadas de emergencia. A partir de esta información, los autores de este estudio han propuesto una metodología para elaborar mensajes de alerta ante inundaciones teniendo en cuenta las emergencias identificadas durante el análisis de las llamadas. Esta metodología representa una oportunidad para adaptar el contenido informacional de los sistemas de alerta a la experiencia real del evento de inundación.
Por otro lado, esta investigación ha propuesto una metodología para mejorar la cartografía de zonas inundables a partir de las llamadas de emergencia recibidas por el servicio 112. En concreto, los autores de este estudio han utilizado la localización de cada llamada de emergencia para ubicar en el territorio cada uno de los puntos de afectación del evento de inundación. De esta forma se han detectado zonas inundables en la comarca de la Vega Baja que no están contempladas en la cartografía oficial.
Tanto la metodología para crear de forma estratégica mensajes de alerta ante estos eventos como la metodología para mejorar la cartografía de zonas inundables a partir del análisis de las llamadas de emergencia representan iniciativas de gran utilidad para la mejora de las estrategias de gestión no estructural del riesgo de inundación.
El minucioso trabajo ha sido realizado por por los investigadores Guadalupe Ortiz, profesora titular de Sociología de la UA; Jorge Olcina, catedrático de Análisis Geográfico Regional en la Universidad de Alicante; Antonio Aledo, catedrático Sociología del Medio Ambiente de la UA; Pablo Aznar-Crespo, profesor de Sociología en la UA y Antonio Oliva, graduado en Geografía y Ordenación del Territorio en la UA y doctorando en Planificación de los Espacios Regionales, también en la UA.