Cero emisiones, cero ruidos, cero vibraciones, cero olores, cero cambios de marchas… Estos cinco ceros resumen la nueva movilidad, sostenible y respetuosa con el medio ambiente, de la que el Peugeot e-208 presume de ser pionero. La ausencia de emisiones, ruidos, vibraciones y olores relacionados con la combustión es sinónimo de vehículo eléctrico. Además, su caja de cambios permite un alto nivel de placer al volante.
Estos cinco ceros permiten sacar el máximo partido a la batería de 50 KWh del Peugeot e-208. Con una autonomía de 340 Km, cubre las necesidades diarias de la mayoría de los automovilistas, tanto en ciudad, hasta ahora el hábitat natural del vehículo eléctrico, como en trayectos largos. Permite realizar viajes por carretera con el respaldo de su sistema de recarga rápida, que permite repostar su batería hasta un 80% de su capacidad en sólo 30 minutos: el tiempo justo para hacer un alto en el camino y tomarse un café o un refresco.
Al volante, el Peugeot e-208 adapta sus prestaciones a las necesidades y los gustos del conductor gracias a sus tres modos de conducción, que se pueden activar de manera sencilla. En recorridos largos, el modo Eco da prioridad absoluta a optimizar la autonomía. En la vida diaria, el modo normal está pensado para ofrecer el máximo confort. Cuando se quiere exprimir al máximo las prestaciones, el modo Sport ofrece sensaciones y dinamismo en un automóvil que puede pasar de 0 a 100 Km/h en 8,1 segundos. Todas estas ventajas y prestaciones se viven sin restricciones, con la misma habitabilidad y volumen de maletero de las versiones equipadas con motores de combustión interna.
La transición energética con el Peugeot e-208 se vive con facilidad: la marca y su red de concesionarios ofrecen una amplia gama de alternativas. Por ejemplo, el servicio Easy-Charge permite cargar el vehículo con la misma tranquilidad con la que un smartphone recarga baterías. Hay disponibles diversas soluciones de carga a domicilio o en el centro de trabajo. La Red de Concesionarios Peugeot facilita el contacto con expertos que evalúan in situ la instalación eléctrica y recomiendan la mejor opción para cada necesidad. Así, con el Wall Box en nuestro hogar, se puede obtener una carga completa en 8 h en monofásico (7,4 kW) y en 5h15 en trifásico (11 kW, próximamente disponible). Con el cable de carga y un enchufe doméstico reforzados el tiempo es de 16 horas.