MIURA 1: objetivo cumplido aunque el cohete se haya perdido en el Atlántico

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El análisis de los datos recabados por la empresa española PLD Space tras el lanzamiento de su cohete MIURA 1 demuestra que la misión ha sido “todo un éxito”. El 100% de los objetivos primarios se ha cumplido y todas las tecnologías desarrolladas por la compañía se han validado en vuelo. Un hito que posiciona a PLD Space como la única empresa privada europea con capacidad de lanzamiento a día de hoy en Europa. 

“La estadística de éxito de un primer lanzamiento en la industria espacial es solo del 45%”, indica el presidente ejecutivo de PLD Space, Ezequiel Sánchez. Para reducir esos elevados niveles de incertidumbre y riesgo, la compañía española siempre ha apostado por ensayar cada subsistema, así como todos los sistemas en conjunto. “El espacio funciona a partir del aprendizaje, nosotros lo hemos conseguido a la primera porque desde el principio asumimos una estrategia con obsesión por el prueba-error”, asegura.  

“Hemos vivido una serie de muchos ‘primeros’”, destaca el cofundador y director de Lanzamiento, Raúl Torres, en rueda de prensa. “Nos hemos convertido en la primera empresa privada de Europa en lanzar un cohete, la primera compañía española que logra un objetivo que posicione al país con una nueva capacidad, la primera de Europa en desarrollar y lanzar un motor combustible líquido alimentado por queroseno y oxígeno líquido (KeroLOX), el primer lanzamiento espacial desde Europa continental y el primer lanzamiento espacial de las startups tecnológicas espaciales europeas”.

El primer vuelo de MIURA 1 cumple todos los objetivos

Durante las últimas dos semanas, PLD Space ha recabado los datos y realizado un primer análisis del lanzamiento de MIURA 1. La misión, que tuvo lugar en la madrugada del pasado 7 de octubre, transcurrió siguiendo todos los parámetros previstos, tanto en el comportamiento de todos los subsistemas y la ejecución de las operaciones.

El vuelo tuvo una duración total de 306 segundos, llegando a 46 kilómetros de altura según estaba previsto en la misión. “Alcanzamos apogeo con una actitud correcta del vehículo”, indica Torres. El cohete consiguió entrar en condiciones de microgravedad y eyectar las fotos individuales del equipo y sus familias. También se han podido recoger los datos del experimento embarcado del Centro de Tecnología Espacial Aplicada y Microgravedad alemán (ZARM) y, siguiendo la tradición de los primeros lanzamientos, PLD Space integró un queso en la bahía de carga útil del cohete. 

En cuanto a la reentrada, la fase supersónica ocurrió de forma exitosa y con resultados de control y estabilidad aerodinámica mejores de lo previsto, destacando el comportamiento de aerofrenos empleados para frenar y estabilizar el vehículo. La fase subsónica del vuelo también fue estable. La eyección del paracaídas de frenado se realizó correctamente y se abrió según lo previsto.

De izquierda a derecha: Raúl Verdú, cofundador y responsable de Desarollo de Negocio, Ezequiel Sánchez, presidente ejecutivo de PLD Space, Raúl Torres, cofundacor y gerente de PLD Space.

La misión concluyó con el amerizaje del lanzador en el océano Atlántico, que ocurrió dentro de la zona de impacto prevista. En cuanto a uno de los objetivos secundarios, la recuperación del lanzador, la información obtenida señala que el contacto contra el agua se produjo de forma lateral y provocó que uno de los dos tanques principales se rompiese, llenándose de agua y hundiendo el vehículo.

“En la zona de impacto no se han encontrado restos que pudiesen flotar, lo que nos indica que el vehículo, más allá de uno de los tanques, quedó intacto”, afirma Torres. Tras ocho horas de operaciones de búsqueda, con el apoyo del Ejército, PLD Space decidió abortar la actividad. 

“Todas las operaciones de lanzamiento se llevaron a cabo según lo previsto y sin ningún contratiempo”, concluye el cofundador. Los excelentes resultados obtenidos en el primer vuelo de MIURA 1 aportan a PLD Space un “conocimiento tecnológico completo” en el desarrollo de lanzadores espaciales y demuestran su madurez tecnológica, así como el acierto de apostar por una “mayor integración vertical de todas las tecnologías”.  

La empresa ya está aplicando las ‘lecciones aprendidas’ a su cohete orbital, MIURA 5, que realizará su primer vuelo en 2025 desde el puerto espacial europeo CSG, en Kourou (Guayana Francesa), y que pondrá satélites de hasta 500kg en órbita polar y de hasta una tonelada en órbita ecuatorial.

“De MIURA 1 a MIURA 5 transferimos más de mil puntos de mejora de los subsistemas”, destaca Torres. “Gracias a MIURA 1, MIURA 5 será un mejor cohete”. Esta primera misión de vuelo ha demostrado la rapidez, escalabilidad, fiabilidad y confianza en el desarrollo del programa, permitiendo a PLD Space tener listo su lanzador orbital en solo dos años. De hecho, el desarrollo de todos los subsistemas de MIURA 5 avanza a buen ritmo. “La ingeniería está en fases muy avanzadas y tenemos previsto hacer los primeros ensayos de subsistemas a finales de 2023”, adelanta el director de lanzamiento.

Una estrategia de negocio sólida y en alza

Actualmente, existe un desajuste entre la demanda y la oferta global de lanzamientos de satélites y pequeños satélites. Por un lado, se estima que el mercado de lanzamiento de pequeños satélites aumentará hasta los 28.400 millones en 2031, una cifra que representa un incremento del 274%, según un informe de Euroconsult. Sin embargo, mientras la demanda de servicios comerciales crece exponencialmente, con el cese de actividad de Ariane 5, la capacidad de acceso al espacio de Europa se ha reducido a cero por primera vez en más de 40 años.

Para dar respuesta a esta necesidad, PLD Space ha construido en torno a su MIURA 5 una propuesta de valor e innovación única. “Ofrecemos al mercado un transporte espacial a los operadores de pequeños satélites a través de a un servicio basado en la dedicación exclusiva, la flexibilidad, la fiabilidad y la sostenibilidad”, destaca el cofundador y Desarrollo de Negocio, Raúl Verdú.

Este servicio personalizado está teniendo muy buena acogida entre los operadores de pequeños satélites. De hecho, PLD Space cuenta con interés comercial por valor de 320 millones de euros,  una cifra que valida su propuesta y modelo de negocio.

Los vuelos comerciales de MIURA 5 comenzarán en 2026 con el objetivo de escalar hasta 30 al año en 2030. “Llegar el primero es importante, pero no sirve de nada si la empresa no se asienta en un modelo robusto y eficiente que sea operacionalmente competitivo en el medio y largo plazo”, puntualiza Verdú.

Lidera el impulso de una industria de lanzadores única en Europa

El desarrollo y fabricación de MIURA 5 implica la creación de una industria de lanzadores espaciales única en Europa. El objetivo no es hacer un cohete, sino establecer una cadena de aprovisionamiento especializada que ponga a España en el epicentro del sector espacial europeo, para lo cual también es clave la colaboración privado-pública. 

“Las barreras de entrada en la industria de lanzadores espaciales son muy altas y hemos sido muy eficientes en el uso del capital si analizas otros operadores”, subraya el presidente ejecutivo, Ezequiel Sánchez. “No hemos desarrollado una aplicación, sino que hemos sido capaces de crear una tecnología desde cero”. 

PLD Space avanza a buen ritmo en el desarrollo de capacidades industriales tanto en infraestructuras, que suman ya 150.000 metros cuadrados, como en la captación de talento internacional de alta cualificación. Actualmente, cuenta con más de 150 empleados de 12 países y la empresa prevé duplicar su plantilla a 300 empleados en 2024.