El Área de Ecología del Departamento de Biología Aplicada de la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche desarrollará durante 2019 un proyecto de investigación para la conservación de la Cerceta pardilla. Este proyecto está apoyado por el Ministerio para la Transición Ecológica, a través de la Fundación Biodiversidad y el Servicio de Vida Silvestre de la Dirección General de Medio Natural de la Generalitat Valenciana. Este estudio consiste en el análisis de la información sobre el movimiento de los ejemplares, el seguimiento en campo de los individuos liberados, así como la evaluación de su supervivencia y su capacidad de reproducción.
Además, para analizar y evaluar el uso del espacio y los patrones de movimiento de las cercetas, once ejemplares fueron equipados con emisores satelitales de posicionamiento GPS en 2018. Estos dispositivos permiten recibir información muy detallada sobre los movimientos a tiempo real, lo que permite obtener información muy relevante para el desarrollo de estrategias de conservación más eficientes.
Liberación de individuos
Con el fin de revertir la situación de amenaza de la especie y ayudar a recuperar las poblaciones, en 2013 se inició un proyecto de reforzamiento poblacional mediante la liberación de individuos, procedentes de un programa de cría en cautividad, desarrollado en las instalaciones del Centro de Recuperación de Fauna “La Granja” de El Saler en Valencia. De este modo, en los últimos años se han liberado más de 250 ejemplares en la Comunidad Valenciana, principalmente en El Hondo. Una parte muy importante del proyecto es la evaluación del éxito del reforzamiento y, para ello, se realiza un seguimiento intensivo, mediante marcajes individuales y monitoreo con cámaras trampas. Esto ha permitido, por ejemplo, constatar la capacidad de adaptarse a la vida en libertad e incluso su capacidad para reproducirse con éxito durante su primer año.
La Cerceta pardilla fue declarada en situación crítica en 2018 como consecuencia del fuerte declive poblacional registrado durante los últimos años. La especie, antaño abundante en los humedales españoles, particularmente en Parque Natural de El Hondo en Elche y las Marismas de Doñana en Andalucía, ha reducido sus efectivos poblacionales de manera progresiva a lo largo de las últimas décadas hasta convertirse en, probablemente, la anátida más amenazada de Europa.