La Universidad de Castilla-La Mancha y el Gobierno de esa región fomentarán el aprendizaje-servico, la investigación y la innovación en centros educativos no universitarios. El convenio que lo regula fue firmado por el rector, Julián Garde, y por la consejera de Educación, Cultura y Deportes, Rosana Rodríguez.
El convenio recoge el interés de las partes por la realización de este tipo de actividades, que conducen “a una mejora en la calidad de la enseñanza de los centros educativos no universitarios de Castilla-La Mancha”, así como “a un mayor desarrollo de competencias técnicas, metodológicas, personales y participativas por parte del alumnado y profesorado de la Universidad”.
En este sentido, se consideran actividades de aprendizaje-servicio aquellas iniciativas de carácter educativo realizadas por la UCLM que combinan procesos de aprendizaje con el servicio a la comunidad educativa a través de los centros docentes no universitarios sostenidos con fondos públicos, mejorando algún aspecto en la enseñanza no universitaria o llevando a cabo un proyecto de sensibilización o de conocimiento del alumnado y profesorado de dichos centros docentes
Por su parte, se incluyen en el ámbito de la innovación e investigación educativa todas aquellas acciones desarrolladas por la UCLM en colaboración con profesorado de los centros docentes no universitarios sostenidos con fondos públicos encaminadas a generar y transferir el conocimiento científico, con especial consideración al ámbito educativo.
Este nuevo acuerdo, que amplía la colaboración establecida por sendos convenios firmados en 2016 y 2018, alcanza a todos los estudiantes y profesores vinculados a la oferta completa de grado, máster y doctorado de la UCLM. Por su parte, los maestros de Educación Infantil y de Primaria, el profesorado de Enseñanza Secundaria y de Formación Profesional y otros profesionales que impartan docencia en centros educativos no universitarios podrán colaborar en las actividades objeto del convenio siempre que acrediten experiencia mínima de tres años al inicio de la actividad y que pertenezcan a la misma especialidad que los alumnos y profesores universitarios.
Tanto la participación en las actividades de aprendizaje-servicio y como en las actividades en el ámbito de la innovación e investigación educativa tendrá siempre carácter voluntario, tanto para los centros como para el personal docente y para el estudiantado.