La rectora de la Universidad de Alicante, Amparo Navarro, ha informado al Consejo de Gobierno, celebrado esta mañana por vía telemática, que la institución académica está preparada para iniciar su desescalada. Según los últimos datos facilitados por el Servicio de Prevención del Campus, la Universidad presenta los índices de incidencia más bajos registrados durante toda la pandemia con apenas 4 positivos. Navarro ha recordado al Consejo que pese a lo halagüeño de las cifras, no hay que bajar la guardia por lo que se han vuelto a revisar y adaptar los protocolos sanitarios: control de aforos, señalización de acceso, tránsito y permanencia en las instalaciones universitarias así como la dispensación de Epis y los procesos de limpieza y desinfección de estancias. La rectora asegura también que se volverá a contar con auxiliares covid siempre que sea necesario, por los buenos resultados obtenidos durante el periodo de exámenes.
Navarro se ha sumado a la solicitud de la CRUE, Conferencia de Rectoras y Rectores de las Universidades Españolas, al Gobierno “para que incluya al Personal Docente e Investigador (PDI) y de Administración y Servicios (PAS) de las universidades entre los grupos prioritarios en la campaña de vacunación frente la COVID-19”.
El objetivo que nos mueve, afirma la rectora, “es recuperar cuanto antes la normalidad académica en los campus españoles”. Pese a la negativa inicial de la primera versión de la Estrategia de vacunación, en la que Sanidad justificaba que la priorización de la vacuna al PDI y PAS de las universidades no era relevante, la asociación rectoral sostiene que hay un volumen importante de PDI que imparte prácticas académicas y talleres en laboratorios universitarios a los cuales la vacuna les permitiría desarrollar su tarea docente sin interrupción y sin riesgo para su salud y la del estudiantado.
Navarro sostiene que los rectores y rectoras “hemos defendido la necesidad de retomar la presencialidad en las aulas porque es una seña de identidad para la mayoría de las universidades españolas”. Con este objetivo, “desde las universidades hemos puesto todos los medios materiales y humanos para no renunciar a esa presencialidad, garantizando la asistencia segura a las aulas al estudiantado de los primeros cursos y priorizando las prácticas”. La rectora concluye, por tanto, parafraseando a la misiva emitida por la CRUE “que la administración de la vacuna al personal universitario es una herramienta fundamental para reforzar la actividad docente, aumentar la seguridad en los campus, normalizar la vida universitaria y proteger el derecho a la Educación”.
En su informe, Amparo Navarro también ha explicado que en sus primeras intervenciones como rectora, tanto en la asamblea de la CRUE, como en la reunión del Consejo Valenciano de Universidades y Formación Superior, ha reiterado la intención de la Universidad de Alicante de implementar el Grado de Medicina “que en la actualidad es un procedimiento abierto que no ha cerrado la Generalitat”, así como también el Máster Oficial Interuniversitario de Electroquímica.
Profesorado emérito
Entre otras cuestiones, el Consejo de Gobierno ha dado el visto a la modificación de la normativa que regula el profesorado emérito de la Universidad de Alicante con el objetivo de adaptarse al marco jurídico general vigente. La modificación se centra en la duración de los contratos. De ahora en adelante la duración del nombramiento del profesorado emérito será de tres años prorrogable a petición del interesado previo informe del departamento por un periodo idéntico.
Hasta ahora la normativa de la UA establecía una duración de un año prorrogable, a solicitud del interesado, por dos períodos anuales más, previo informe del Consejo de Departamento. La modificación parcial de la normativa reguladora del profesorado emérito incorpora una disposición transitoria para atender las situaciones vigentes afectadas por la aprobación de la presente modificación.
En este sentido, el profesorado emérito que en el curso 2020-2021 se encuentre en el primero o segundo año de su nombramiento no necesitará solicitar su prórroga hasta el tercer año de su nombramiento en el momento del cual podrá solicitarla para otro periodo de tres años. El profesorado emérito que en el curso 2020-2021 se encuentre en el tercer año de su nombramiento podrá solicitar su prórroga para otro periodo de tres años. Esta solicitud podrá presentarse durante el mes siguiente a la entrada en vigor de la presente adaptación.
