El profesor titular de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) y secretario de Estado de Empleo, Joaquín Pérez Rey, ha visitado este martes el Campus de Toledo para inaugurar el posgrado Derechos humanos laborales, empresas transnacionales y diligencia debida, que se ofrece en el marco de los XXIV Cursos de Posgrado en Derecho. En su intervención, expuso cuestiones relacionadas con la reforma laboral, que ahora cumple dos años, y sus efectos sobre el mercado de trabajo o las afiliaciones, entre otras.
“Es un posgrado con solera, dedicado a uno de los maestros del laboralismo latinoamericano, Óscar Ermida Uriarte, y que demuestra la relación de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de Toledo con Latinoamérica en general y con el Derecho del Trabajo en particular”, señaló Pérez Rey en declaraciones previas al acto inaugural. Según indicó, la UCLM y en concreto esta facultad, “son una fuente permanente de inspiración en el estudio de las normas laborales y en la interpretación del Derecho del Trabajo como una manera de proteger y defender los derechos sociales de los trabajadores”.
La reforma laboral “es la reforma más importante de la democracia española y ha cambiado la fisonomía del mercado de trabajo español”, afirmó. Según Pérez Rey, “hoy tenemos menos jóvenes en desempleo que nunca, tenemos más mujeres trabajando que en toda nuestra historia, tenemos récord de afiliación y tenemos trabajo estable y de calidad”. En el momento actual, marcado por “la absoluta incertidumbre internacional con los conflictos bélicos, la tensión en los precios y la ruptura en las cadenas de suministros”, según dijo, “hemos logrado tener la mejor situación de empleo de los últimos 16 años a través del trabajo estable y de calidad gracias a una reforma laboral pactada con los interlocutores sociales”.
Por otra parte, destacó la relevancia de la reforma laboral en Castilla-La Mancha, donde “nunca ha habido tanta ocupación, nunca ha habido tantas mujeres trabajando y nunca los jóvenes han tenido una situación tan boyante como la que tienen ahora”. A esto se han sumado “otros elementos muy decisivos e importantes de esta legislatura”, en los que “vamos a persistir”, según indicó, en referencia a la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), que en la región “ha beneficiado a más de 90.000 personas y que vamos a subir en las próximas semanas”.
En relación con esta subida, y a preguntas de los medios sobre las declaraciones recientes del presidente de Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Antonio Garamendi, el secretario de Estado respondió que “el diálogo social es un proceso de construcción de decisiones que no funciona a través del chantaje” y que “si el punto de equilibrio para llegar a un acuerdo es una subida del SMI en torno al 4 % y la patronal se desvincula de esa decisión, es evidente que el Gobierno tratará de llegar a un acuerdo con las organizaciones sindicales que por fuerza no será del 4 %”.
Una subida “imprescindible para seguir avanzando, para que los trabajadores no pierdan poder adquisitivo y para cumplir nuestros compromisos internacionales con la Carta Social Europea”, dijo, y mostró su confianza en “la seriedad y en el buen hacer de la patronal española, especialmente del señor Garamendi”, a quien animó a suscribir el acuerdo en torno al 4 %. “Todavía no contemplo la otra posibilidad de alcanzar un acuerdo con las organizaciones sindicales en torno a una cifra diferente. Esperaremos a que la patronal se pronuncie”, afirmó.