El proyecto de “Smart and Secure EV Urban Lab II”, financiado por el II Plan Propio del Vicerrectorado de Smart Campus de la Universidad de Málaga, se encuentra en su recta final, dando como resultado esta semana el despliegue de una microred y un sistema de monitorización capaz de gestionar y visualizar en tiempo real estados anómalos de estaciones de carga de vehículos eléctricos integradas en la propia red. El sistema también detecta anomalías del sistema de almacenamiento de energía y de la energía solar recogida a través de los paneles fotovoltaicos instalados.
El sistema incorpora tecnologías disruptivas como la inteligencia artificial y la red blockchain. Estas tecnologías ayudan a monitorizar el rendimiento funcional de cada estación y a medir el nivel real de potencia y tensión de la microred de una forma confiable y segura, además de permitir a operarios localizar en tiempo real un determinado problema dentro de un sistema.
“Las causas de estos problemas pueden ser muy variados, desde un fallo de hardware o software, a un incidente casual o una amenaza intencionada, como, por ejemplo, una denegación de servicio, modificaciones de parámetros o valores de medición, robo de energía o abusos que pueden conllevar a sobrecalentamientos en de la red”, explica Alicia Triviño, profesora del Departamento de Ingeniería Eléctrica que, junto a Cristina Alcaraz, dirigen el proyecto Smart & Secure EV Urban Lab II de la UMA.
Tanto la red de microgrid, como las estaciones de carga, forman parte ya de un laboratorio compartido, denominado “Urban Lab II”, desarrollado por dos grupos de investigación de la Universidad de Málaga, bajo el nombre de NICS Lab e IPLab. El objetivo de este laboratorio es dar soporte y apoyo a las investigaciones de ambos grupos, como puede ser la ciberseguridad y la resiliencia de estos tipos de redes, y en la mejora continuada de la distribución de servicios y su monitorización. Para ello, se ha puesto en marcha para futuras acciones una microred con un sistema fotovoltaico de 5,4 kW, una batería de 5 kWh, un inversor trifásico conectado a red de 11 kW y dos estaciones de carga de vehículos eléctricos de 11 y 3.7 kW.
La presentación de este proyecto tuvo su reflejo en la celebración del seminario científico ‘Mirando hacia un smart campus más sostenible y más controlado’, celebrado en la ETSI Industriales el pasado 25 de abril, con la integración de tres ponentes internacionales de gran prestigio como son los profesores Héctor Chiacchiarini, de la Universidad Nacional del Sur de Argentina, Norberto García, de la Universidad Michoacana de México, y Diego Arcos de la Universidad de las Fuerzas Armadas de Ecuador. Además, este proyecto ha servido para poner en marcha un nuevo proyecto de innovación educativa, que aborda aspectos relacionados con la multidisciplinariedad, concienciación y sostenibilidad segura en entornos «smart» en campus universitarios.