La ‘comida basura’ sienta muy bien a las cigüeñas

Compartir

Las cigüeñas han ampliado su radio de expansión gracias a los vertederos de basura. Un estudio del Grupo de Investigación en Sanidad y Biotecnología (SaBio) del Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC – CSIC, UCLM, JCCM) ha estudiado el comportamiento de estas aves y ha revelado que los pollos que comen comida de la basura tienen un mejor estado nutricional que los que se alimentan con otros recursos más naturales.

El uso de los vertederos como fuente de alimento por parte de la cigüeña es un comportamiento conocido desde hace años. Sin embargo, existe poca información con respecto al posible impacto directo de este comportamiento sobre el estado de salud de los individuos.

Diversos estudios han puesto de manifiesto las ventajas del uso de vertederos en cigüeñas a nivel poblacional. Sin embargo, hay muy pocos datos sobre los efectos de este comportamiento a nivel individual, es decir, sobre la fisiología de los animales. Hay que tener en cuenta que, a pesar de las ventajas de ser una fuente de alimento prácticamente inagotable, la comida que un animal pueda encontrar en un vertedero presenta diversos problemas.

Por un lado, puede producirse un daño físico por la presencia de plásticos, cristales y metales. Además, hay presentes microorganismos potencialmente dañinos. Finalmente, hay que tener en cuenta que esta comida puede carecer de diversos nutrientes esenciales, lo cual sumado a la presencia de distintas sustancias tóxicas (como metales pesados o fármacos) puede hacer que el efecto de este alimento sobre la fisiología en general y el estrés oxidativo en particular sea importante.

Un equipo multidisciplinar compuesto por investigadores de la Universidad de Lund (Suecia), el Grupo de Investigación en Sanidad y Biotecnología (SaBio) del Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC – CSIC, UCLM, JCCM), la Universidad Complutense de Madrid (UCM) y SEO Birdlife ha evaluado el efecto potencial del uso de los vertederos como fuente de alimentación sobre el estado de pollos de cigüeña blanca, centrándose en la evaluación del estado nutricional y el balance oxidante, este último por ser muy sensible a la calidad de la dieta y la presencia de tóxicos.

Qué cigüeñas se alimentan en vertederos de basura

Para este estudio se tomaron muestras de pollos de cigüeña de 10 colonias distintas, localizadas en Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura y Madrid. Como se ha demostrado que el uso de vertederos como fuente de alimento por la cigüeña blanca está directamente relacionado con la distancia a estos, hemos usado dicha distancia como indicador del uso, teniendo una colonia un 100% del uso, otra un 0% y las otras 8 con proporciones distintas de uso intermedias. Algunas de estas colonias fueron muestreadas en dos años consecutivos, para determinar si la tendencia observada se mantenía en el tiempo.

Los resultados han revelado que el estado nutricional de los pollos de cigüeña blanca alimentados con comida procedente de vertedero es mejor, independientemente del año de estudio, con valores más altos de colesterol, triglicéridos y urea, lo que sugiere una mayor tasa de alimentación. Además, valores más altos de colesterol HDL (el conocido como “colesterol bueno”), demuestran que el estado nutricional es mejor cuanto mayor es el uso del vertedero.

Qué efectos tiene sobre las cigüeñas los alimentos que encuentran en vertederos

Sin embargo, la relación entre el uso de vertedero como fuente de alimento y el balance oxidante no es tan clara. Por un lado, se encontraron diferencias entre años, observándose que los pollos nacidos en 2014 tuvieron mayores valores de diversos antioxidantes como la vitamina E y los carotenoides luteína y zeaxantina, y menores de LDH (indicador de daño oxidativo) que los nacidos en 2013. Pero, además, la relación de algunas variables con el uso del vertedero sólo se produjo en uno de los años. Por ejemplo, la capacidad antioxidante del plasma mostró ser mayor en los individuos que comen en vertedero, justo lo contrario que ocurría con el MDA (indicador de daño oxidativo a lípidos), pero esto sólo ocurría en 2013. Esto es debido probablemente a una mayor presencia de tóxicos en la comida procedente de vertederos, lo que desencadena una respuesta antioxidante en los individuos. Sin embargo, parece que las condiciones ambientales del 2014 permitieron una mayor presencia de antioxidantes en la dieta, lo que enmascara la relación observada en 2013.

Este trabajo pone de manifiesto que los pollos de cigüeña alimentados con comida procedente de los vertederos presentan, de forma general, un mejor estado nutricional y una mejor condición física que los pollos que son alimentados con alimentos más naturales. Además, se observa que existe un efecto sobre el balance oxidante. Sin embargo, esta relación está muy supeditada a las condiciones ambientales, y su efecto sobre los antioxidantes presentes tanto en alimentos naturales como procedentes de vertederos. Todo parece indicar que, a pesar de los problemas de salud potenciales derivados de un mayor nivel de metahemoglobina en sangre y de una mayor prevalencia de bacterias intestinales multirresistentes, este tipo de alimentación artificial resulta ser relativamente beneficiosa a nivel individual para la cigüeña blanca.