Este investigador joven de la UMU recibe un premio por su divulgación sobre Medicina

Compartir

Enrique Ortega Forte, investigador predoctoral del grupo de Metalofármacos de la Universidad de Murcia (UMU), acaba de recibir el segundo premio de divulgación sobre Medicina y Salud otorgado por la Fundación Lilly y The Conversation por su artículo Hacer visible lo invisible: la luz y la vida íntima de las células.

Enrique Ortega Forte, investigador de la UMU.

Entre 90 candidaturas presentadas en esta tercera edición del certamen, Ortega Forte ha sido seleccionado por un jurado que ha valorado «la excelente cantera de jóvenes que, además de investigar en sus diferentes campos, tienen la sensibilidad y la capacidad para divulgar la ciencia que desarrollan al resto de la sociedad«.

El artículo galardonado relata el descubrimiento de la bioluminiscencia en el mar y cómo esta fluorescencia, presente de forma natural en la biología, ha podido emplearse para el desarrollo de estudios científicos que intentan hacer frente al cáncer o al párkinson. “Siempre me ha parecido muy importante divulgar lo que hacemos en el laboratorio y esta oportunidad me parecía perfecta para contar parte de nuestro trabajo”, resalta el investigador de la UMU. “Una de las cosas que más utilizamos en el laboratorio es algo tan simple como la luz. Si queremos observar qué ocurre dentro de las células utilizamos métodos de marcaje fluorescente. La fluorescencia también es un fenómeno propio de la luz, pero con ella podemos hacer “brillar” partes de las células que antes no podíamos ver. Para mí la fluorescencia tiene algo especial. Me parece algo fascinante. Y se utiliza de manera rutinaria en todos los laboratorios del mundo”, concluye Ortega Forte.

Es el segundo año consecutivo que la Universidad de Murcia recibe este reconocimiento destinado a la divulgación joven. En el 2022, Claudia García Cobarro, investigadora y doctoranda del grupo de Fisiología, Nutrición y Cronobiología de la UMU, se alzó también con este premio por su artículo divulgativo Luz, arquitecta de la vida. En esa ocasión, García Cobarro compitió junto a otras 86 candidaturas, entre las que el jurado destacó «el nivel de los trabajos, su estructura narrativa y el uso de ingeniosos recursos literarios».