El profesor de la UPCT Iván Alhama, del departamento de Ingeniería Minera y Civil, y su doctoranda, Mª Encarnación Martínez Moreno, regresaron hace unos días en un vuelo Notthigham-Alicante. Iván llevaba 7 semanas y tenía previsto estar tres meses. Mª Encarnación llegó hace tan solo dos semanas para formarse allí durante 16 semanas.
El profesor y la doctoranda cuentan que a su llegada todo fue bien. «Pero ha sido una escalada de acontecimientos tan rápida… El cambio de situación ha resultado tan brutal que nos hemos visto abocados a regresar. Aquí la Universidad cortó las clases a principios de semana. Estábamos bien, tranquilos en nuestros apartamentos, tomando precauciones y conscientes de la situación en España, pero con cierta preocupación debido a la ausencia de medidas de contención del gobierno británico en la propagación de la pandemia, la posibilidad de cierre del espacio aéreo y la recomendación del gobierno instando a los españoles en el extranjero a volver», señalan.
Iván Alhama explica que él adelantó el billete de vuelta del 4 de mayo al 5 de abril, «pero esta mañana (la del 18 de marzo) hemos comprado el billete para hoy mismo porque hemos visto que algunas compañías estaban cancelando vuelos desde Manchester, desde Londres». No queremos que se cierre el espacio aéreo o que las compañías dejen de fletar vuelos y quedarnos atrapados», relatan.
Ahora, la incertidumbre de no saber qué pasará. ¿Regresarán o habrá terminado su estancia investigadora antes de los previsto? «Retomarla o no ya depende de si la cosa se pone mejor en el futuro», señala Alhama.
De momento, también el sponsor del profesor y de la doctoranda de la UPCT, Matteo Icardi, profesor del School of Matemathical Sciences en la Universidad de Nottingham, con quien estaban trabajando en Reino Unido, fue a Italia y no ha podido regresar a Reino Unido, por lo que los trabajos se mantenían mediante videoconferencia y correo electrónico.
Otro profesor de la UPCT, Antonio Juan Briones, del departamento de Economía de la Empresa, se encuentra en Royal Holloway, en la University of London. Briones llegó el pasado día 2 a través de un programa de movilidad internacional. En su caso el regreso es un poco más difícil porque se fue en coche remolcando su caravana, casi 2500 kms, «vivo en un camping en Chertsey muy cerca de Londres y debería volver igual», explica al tiempo que añade que las clases ya son online y la universidad tiene solo estudiantes que están en la biblioteca preparando exámenes o en las residencias.