La Cátedra de Emprendedores de la Universidad de Murcia ha elaborado el estudio titulado ‘Situación y perspectivas del emprendimiento en la Región de Murcia ante la crisis de la COVID-19′; realizado con los resultados de una encuesta remitida a 236 empresas de la Región y 4.314 del resto de España y que cuenta con la colaboración del Instituto de Fomento de la Región de Murcia y Bankia. Las respuestas obtenidas indican que un 59,3% de los emprendedores regionales mantienen su actividad, ya sea operando con normalidad (13,1%) o bien apoyados en el teletrabajo (46,2%), porcentaje ligeramente superior a lo que sucede para el conjunto de España (58,4%).
Mantener la actividad pese a las restricciones generadas por el estado de alarma ha sido posible gracias a los medios tecnológicos, especialmente la videoconferencia, utilizada por el 50,8%; las plataformas para compartir archivos (37,7%); y las redes internas virtuales (VPN), que aplican un 17,8% de empresas. El grado de digitalización ha sido clave para afrontar la situación provocada por la COVID-19 para el 73% de los emprendedores regionales, por lo que desde la Cátedra se apunta a la importancia del apoyo para adquirir equipamiento que permita incrementar la digitalización de las empresas.
De quienes han mantenido la actividad, el 50,2% asegura haber sufrido un descenso considerable de la demanda; una cifra superior a la del resto de España, que manifiesta una reducción en el 43,9% de los casos. Como consecuencia hay un 37,6% de iniciativas que temporalmente ha cerrado en la Región de Murcia. Solo un 6,9% de las empresas asegura haber tenido un incremento de la demanda.
Caída de la actividad
Todo este contexto lleva a los emprendedores y emprendedoras a aplazar planes de inversión o expansión (35,6%), a cancelación de pedidos a proveedores (24,2%) y el abandono de algunos mercados (13,6%); datos que, según los investigadores de la UMU, anticipan una fuerte caída de la actividad entre los emprendedores. El 27,1% ha optado por cambiar el modelo de negocio como forma de afrontar la crisis de la COVID-19. Buscar financiación externa (22,0%) y la modificación de condiciones financieras previas a la crisis (9,3%) son otras importantes líneas de actuación.
Por lo que respecta al empleo, prácticamente el 45,4% de los emprendedores ha perdido capital humano, de forma definitiva (mediante despidos) o temporalmente. Reducir horas de trabajo o el número de personas empleadas han sido medidas a las que han tenido que recurrir. En este sentido, mientras que un 9,3% de empresas ha despedido a algún empleado y un 36,1% ha puesto en marcha un ERTE, un 46,3% del total de empresas no ha tomado medidas excepcionales en materia laboral.
Financiación y ayudas recibidas
La crisis generada ha influido en la financiación prevista de las iniciativas empresariales emprendedoras regionales en el 40,9% de los casos. Los resultados obtenidos indican que será clave facilitar la liquidez de los emprendedores, así como apoyarles en los retos de inversión que tengan que afrontar hasta la salida de la situación de crisis económica. Una situación prolongada de crisis podría llevar a la desaparición de muchas iniciativas emprendedoras, por lo que habrá que valorar poner en marcha medidas para que las iniciativas nuevas puedan llegar a consolidarse y mantenerse, según cada caso.
Expectativas de futuro y ayudas
En la Región de Murcia el grado de impacto de la crisis de la COVID-19 en el contexto de los emprendedores es muy negativo o negativo para el 78,3% de los encuestados (casi idéntico a cómo se valora a nivel de España, 78,7%), siendo valorado como positivo o muy positivo sólo por el 9,4% de los emprendedores regionales (11,6% a nivel de España). El impacto negativo es significativamente mayor en las iniciativas consolidadas. Un dato positivo, en cuanto a la aparición de nuevas oportunidades en el mercado en la Región de Murcia, es que sólo el 3,4% de los encuestados responde de forma negativa (6,1% en el conjunto de España), lo que significa que el 96,6% restante ven posibilidad de nuevas oportunidades.
La reducción de la inversión privada y el miedo a asumir riesgos son dos de las grandes inquietudes ante el escenario de los próximos meses. En el horizonte de un año las empresas encuestadas consideran probable necesitar ayudas públicas, lanzar nuevos productos y servicios, buscar financiación externa y reducir personal. Ante este panorama, Las principales actuaciones que demandan los emprendedores regionales de las Administraciones Publicas (Estatal, Autonómica y Local), de manera prioritaria, tanto para mantener las iniciativas como para aprovechar las oportunidades son eliminar cuotas de autónomos e impuesto de actividades económicas durante 1 año –78,8%– (73% a nivel nacional); eliminar trabas burocráticas –65,7%– (66% a nivel de España); poner en marcha líneas de crédito sin coste y a largo plazo –62,3%– (58% a nivel nacional); reducir las cotizaciones a la seguridad social de los empleados –60,2%– (56% a nivel nacional); y promover más ayudas para la creación de empresas –46,2%–. (40% a nivel de España).