En el siglo XIX, las élites librepensadoras de este país se sumaron a las prácticas espiritistas que llegaron de Estados Unidos. Este movimiento encontró en Amalia Domingo Soler (1835-1909) una figura crucial. Escritora nacida en Sevilla, destacó en la Barcelona de la época, como una figura floreciente del pensamiento liberal y del feminismo. Una mujer poco común en la época, cuya figura retrata la investigadora de la Universidad de Granada, Amelina Correa, en su nuevo libro.
La investigadora de la Universidad de Granada, recientemente galardonada con el premio de investigación que otorga la Real Asociación de Hidalgos de España, firma un estudio que acerca la figura de esta escritora singular, que supo despuntar entre los movimientos liberales de la época.
Amalia Domingo Soler y el espiritismo de fin de siglo se centra en la figura pionera de esta escritora sevillana del siglo XIX, afincada en la efervescente y próspera Barcelona que en las últimas décadas de esa centuria ve florecer el arte y la literatura modernistas ejemplificados en la mágica -y mística- arquitectura de Antoni Gaudí y en las Festes Modernistes que el poeta y pintor Santiago Rusiñol inaugura en Sitges.
Todo ello, en un contexto de progreso económico protagonizado por una industriosa burguesía de creciente poder, que posibilita en buena medida la potencia de una industria editorial de riqueza y variedad inusitada. Pero al mismo tiempo, esa cosmopolita y activa Barcelona propicia los movimientos obreros y el anarquismo más activos de toda la Península y la lucha por los derechos de las mujeres, en muchos casos asociada al librepensamiento, la masonería y la reivindicación de una enseñanza laica, con frecuencia teñidos de un perceptible anticlericalismo.
En este fecundo magma arraiga un movimiento como el espiritismo, que, procedente en sus inicios de los Estados Unidos, donde surge hacia mediados del XIX, se extiende en el curso de unos pocos años por Europa. Concebido como una conjunción de ciencia, religión y filosofía, el nuevo credo pronto desarrolla una importante red de círculos y hermandades por toda España, que recurrirán a periódicos y revistas como órganos de expresión.
Por tanto, desde un primer momento el espiritismo va a estar vinculado con las letras, y en este terreno destacará con luz propia el nombre de Amalia Domingo Soler, considerada a nivel internacional como la principal escritora espiritista del país.
Y es que, en efecto, Amalia Domingo Soler fue la escritora española más destacada en ese complejo ámbito del espiritismo de finales del XIX y primeras décadas del XX, en el que sobresalen a nivel internacional nombres importantísimos como los de Victor Hugo o Arthur Conan Doyle, creador de Sherlock Holmes.
Pero, además, fue pionera en muchísimos aspectos que la convierten en una mujer muy poco común en su época, como su temprana empatía hacia los discapacitados. Vinculada con el librepensamiento, la masonería y la defensa de la enseñanza laica, fundó y dirigió una revista, “La Luz del Porvenir” durante casi veinte años, en la que aparecen firmas señeras como las Emilia Pardo Bazán o Carmen de Burgos.