La infección por el virus de Zika es causada por la picadura de mosquitos infectados del género Aedes, y suele generar fiebre leve, sarpullidos, conjuntivitis y dolores musculares. No hay una vacuna ni un tratamiento específico para el zika, sólo un manejo sintomático que consiste en descansar y en tomar acetaminofén o paracetamol para el control de la fiebre. La alarma ha saltado por la epidemia que se expande por América del Sur donde 20 países están afectados y, los casos de microcefalea en los fetos de las mujeres embarazadas contagiadas.
La profesora de Virología de la Universidad Francisco de Vitoria, Susana Álvarez Losada, analiza los riesgos que tiene la enfermedad del virus Zika, si hay riesgo de epidemia en España y qué hacer para protegernos.
¿Qué es el virus Zika? El virus Zika es un virus emergente miembro de la familia Flaviviridae, que también incluye el virus del dengue, el virus West Nileo el chikungunya. Se identificó por vez primera en Uganda, en 1947, y hasta hace pocos años había permanecido oculto y remoto, causando reducidos casos, probablemente en África. Después, poco a poco, ha ido saltando a otros países del mundo hasta llegar a América.
¿Cómo se transmite? El principal modo de transmisión es a través de la picadura de mosquitos infectados del género Aedes, fundamentalmente Aedes aegypti en las regiones tropicales. Aunque cuantitativamente, hoy la inmensa mayoría de los casos se debe a la picadura del mosquito, no se descartan otras vías de contagio, como la transmisión sexual, perinatal y sanguínea. Por ahora se descarta que se transmita por la lactancia materna.
¿Es realmente peligroso? No. Afortunadamente la tasa de mortalidad es baja. Los casos del Zika, desde el punto de vista de la enfermedad son casos muy leves, y no hay apenas ninguna complicación asociada, salvo los casos de embarazadas infectadas.
¿Cuáles son los síntomas del afectado? Se estima que la infección sólo producirá síntomas en el 20% de los pacientes. El periodo de incubación (tiempo transcurrido entre la exposición y la aparición de los síntomas) de la enfermedad no está claro, pero probablemente sea de pocos días. Los síntomas, que suelen durar entre 3-7 días, consisten en fiebre, conjuntivitis, malestar y cefaleas, dolores musculares y articulares fundamentalmente en manos y pies, y una erupción cutánea que comienza en la cara, distribuyéndose por el tronco acompañada de picor en algunas ocasiones.
¿Cuáles son las posibles complicaciones del virus Zika? En 2015, las autoridades sanitarias locales de Brasil observaron un aumento en el número de recién nacidos con microcefalia coincidiendo con un brote de la enfermedad por el virus Zika. Las autoridades y organismos sanitarios investigan la posible conexión entre la microcefalia y el virus además de otras causas posibles. Lo cierto es que a día de hoy, no sabemos en qué porcentaje la mujer puede transmitir la infección al feto, ni cuántos de ellos van a desarrollar microcefalia.
Además, varios países afectados por el virus Zika han informado de un aumento anormal del número de casos del síndrome de Guillain–Barré, enfermedad autoinmune en la que el organismo ataca a una parte del sistema nervioso periférico. No se conoce exactamente el desencadenante del síndrome.
¿Deberían preocuparse por el virus de Zika las embarazadas? Mientras no se tenga más información, las mujeres embarazadas o que tengan previsto quedarse embarazadas deberían extremar las precauciones para protegerse de las picaduras. En Estados Unidos, el Centro de Control y Prevención de Enfermedades recomienda que las mujeres embarazadas no viajen a 14 países de América Latina; entre ellos, Brasil, Puerto Rico, Venezuela o Colombia.
¿Existe algún tratamiento para la infección? La enfermedad por el virus de Zika suele ser relativamente leve y no necesita tratamiento específico. Los pacientes deben estar en reposo, beber mucha agua y tomar analgésicos comunes para el dolor y la fiebre. En la actualidad no hay vacunas.
¿Qué puedo hacer para protegerme? Para evitar las picaduras conviene utilizar repelentes de insectos, ponerse ropa (preferiblemente de colores claros) que cubra al máximo el cuerpo, utilizar barreras físicas (pantallas protectoras, puertas y ventanas cerradas), y dormir con mosquiteras. Es también importante vaciar, limpiar o cubrir los contenedores que puedan acumular agua, como cubos, macetas o neumáticos, para eliminar los posibles criaderos de los mosquitos.
¿Hay riesgo de epidemia en España? A día de hoy se han confirmado varios casos, todos importados (personas procedentes de los países afectados). El principal riesgo de introducción en nuestro país estaría asociado con la llegada de viajeros infectados procedentes de zonas endémicas en aquellas comunidades autónomas donde hay presencia de personas originarias de esos países. El análisis de riesgo realizado tanto por el Ministerio de Sanidad como por el Centro Europeo de Control de Enfermedades concluye que “El riesgo de que haya muchos casos de contagios por el virus del Zika en Europa y en España es extremadamente bajo”.
En el litoral Mediterráneo, así como en el País Vasco, se ha detectado la presencia de Aedesalbopictus (el llamado mosquito tigre que es un ‘primo hermano’ del Aedes Aegypti), lo que plantea un escenario favorable a la transmisión del virus en España. Teóricamente, el mosquito tigre sí podría contagiar la enfermedad, pero todavía no está bien demostrado si sería un buen vector. No hay que olvidar, sin embargo, que la posibilidad teórica existe.