El Auditorio de Roquetas de Mar se llenará con la sensibilidad de Amaia Montero, en un concierto de presentación de su primer trabajo en solitario tras su marcha de La Oreja de Van Gogh. Amaia Montero llega con ‘Amaia Montero’, título del disco que contiene 11 canciones compuestas por la artista donostiarra y del que se ha extraído Quiero ser como primer single. “Nunca olvidaré este primer disco”, dice Amaia. “Ha sido un aprendizaje tanto profesional como personal. Como madurar de golpe”. La cita es este sábado, a las 22 horas, en el Auditorio de Roquetas.
Producido por el italiano Claudio Guidetti y compuesto, elaborado, grabado y mezclado en Irún, Madrid, Génova, Milán y Los Ángeles, es un álbum que, afirma Amaia, “refleja mi forma de escribir: directa, sencilla, de corazón. He intentado hacer un disco honesto, huyendo de una producción excesiva. Ahora, toda la responsabilidad es mía y he querido grabar un disco en el que lo más importante fueran las canciones”.
El debut en solitario de Amaia Montero es un ejercicio en el que ha buscado la esencia del pop y en el que la artista ha estado presente y activa en todo el proceso, desde la composición hasta las mezclas finales. Las guitarras marcan el sonido de un álbum en el que Amaia ha compuesto tres emocionadas canciones dedicadas a su padre, a su madre y a sus ex compañeros de La Oreja de Van Gogh. “Dejé la banda por una necesidad artística de expresar lo que soy, pero queda el cariño y el respeto después de lo que hemos vivido juntos”.
Junto a ellas está Quiero ser, el primer single del álbum. Es un tema en medio tiempo, cadencioso, magníficamente interpretado y que refleja el sentimiento que recorre el álbum. “La canción habla de mí, es una declaración de intenciones” dice Amaia.
Amaia Montero está de gira con su disco, atrás quedan una carrera de diez años con La Oreja de Van Gogh, con cuatro álbumes fundamentales plagados de éxitos y que la cantante y compositora ha dejado situada en lo más alto. “Ahora, mi primer disco en solitario ha sido como empezar desde cero, con los sentimientos a flor de piel, con la posibilidad de sentirme yo misma” dice Amaia.
