- La contribución española en este centro, en sus programas y actividades, abarca hasta 2030.
- Este acuerdo permite al MICIU obtener derechos de uso del haz de luz del ILL para la comunidad científica española por un 4,5 % del tiempo de haz de neutrones disponible.
- España es miembro científico desde 1987 del ILL, un centro de investigación internacional, con sede en Grenoble (Francia) que posee la fuente de neutrones más intensa del mundo para el estudio de la estructura y dinámica microscópica de materiales.
El Consejo de Ministros ha aprobado hoy el acuerdo entre el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades (MICIU) y el Instituto Max Von Laue – Paul Langevin (ILL), por el que España destina 37,3 millones de euros a este centro para continuar impulsando la participación del personal investigador de nuestro país en sus programas y actividades entre los años 2024 y 2030.
Desde la adhesión de España en 1987 como miembro científico del ILL, el MICIU contribuye económicamente a este Instituto para que los científicos y científicas de nuestro país pueda acceder al uso de sus instalaciones.
En concreto, este acuerdo permitirá al MICIU obtener derechos de uso del haz de luz del ILL para la comunidad científica española por un 4,5 % del tiempo de haz de neutrones disponible.
España, en calidad de miembro científico, ocupa, junto con Suecia, el puesto de mayor contribución al ILL, sin incluir a los socios fundadores: Francia, Reino Unido y Alemania. Esta situación refleja el compromiso continuo y destacado por parte de la comunidad científica española.
Líder mundial en el suministro de neutrones para la sociedad
El ILL es un centro de investigación internacional, con sede en Grenoble (Francia), que posee actualmente la fuente de neutrones más intensa del mundo para el estudio de la estructura y dinámica microscópica de la materia.
La investigación que se lleva a cabo en el ILL se centra tanto en la ciencia fundamental (60 %) como en los desafíos sociales modernos (40 %). Abarca temas de biología, química (verde) y ciencia de los materiales, así como física de la materia condensada, nuclear y de partículas.
Entre sus desarrollos, se trabaja en el diseño de baterías, combustibles y catalizadores, plásticos y productos farmacéuticos, o la física de los dispositivos electrónicos del futuro.
El ILL puede adaptar especialmente sus haces de neutrones para investigar los procesos fundamentales que ayudan a explicar cómo se formó nuestro universo, por qué tiene el aspecto que tiene hoy y cómo puede sustentar la vida, e investigar los procesos biológicos a nivel celular y molecular.
En total, unos 1.500 investigadores de más de 40 países, seleccionados previamente por un comité de revisión científica, visitan cada año el ILL para realizar en torno a 1000 experimentos, que dan lugar a un elevado número de publicaciones en las más prestigiosas revistas científicas.