La Universidad de Almería vive hoy una fecha clave para su futuro. Durante este jueves, el Consejo de Gobierno dará el visto bueno definitivo al plan de ajuste presentado por el rector, Pedro Molina, que contempla la fusión de centros, que pasaran de ocho a cinco, así como el despido de la mayor parte de la plantilla de profesores asociados, y todo en un clima de tensión jamás vivido en el Campus de La Cañada, debido a las formas y la falta de diálogo a la hora de acordar las medidas de recorte.
El Consejo de Gobierno de llegará precedido de una serie de jornadas de movilización y reuniones en las que los trabajadores de la Universidad, personal de administración y servicios y personal docente e investigador, han estado más unidos que nunca, a la hora de mostrar su rechazo a los recortes aprobados por el rector y su equipo en un anterior Consejo de Gobierno.
Con el plan de ajuste que saldrá aprobado, habida cuenta de la amplia mayoría con la que en este órgano cuenta Pedro Molina, la Universidad de Almería cambiará su estructura. Por un lado, se pasará de ocho a cinco centros; se eliminarán la mitad de los departamentos existentes en la actualidad, que pasarán de 31 a 15; mientras que se aprobará la no renovación de los contratos a la mayoría de los cien profesores asociados; al tiempo que se reducirán cuatro vicerrectorados.
El plan de ajuste contempla otras medidas de ahorro como la reducción de gasto en infraestructuras, agua y energía, unos esfuerzos con los que el rector aspira a ahorrar más de dos millones de euros, para hacer la Universidad más sostenible y contribuir al ahorro en los campus andaluces, dictado por la Junta en 130 millones de euros.
La situación no puede ser más tensa en la Universidad, ya que las formas en las que Pedro Molina está llevando el proceso no han caído nada bien entre la comunidad universitaria, que no entiende que la de Almería tenga que ser la punta de lanza y el laboratorio de los ajustes en esta comunidad autónoma. Y es que, mientras universidades como Málaga o Granada presentan planes encaminados a la eficiencia de las instalaciones, en Almería se está tocando la propia estructura organizativa y al cuerpo docente.
El propósito con estas medidas de ajuste es conseguir el equilibrio en las cuentas que dicta el Real Decreto 14/2012.