Piden a Adra que no dé la licencia al crematorio del municipio

El crematorio de Adra está proyectado muy cerca de viviendas.

La Plataforma contra la Ubicación del crematorio de la capital se suma a las críticas de movimientos como Democracia Real Ya de Adra para frenar la construcción de instalaciones altamente contaminantes junto a las viviendas. Por ello, dentro del plazo legal de alegaciones, esta asociación ha pedido al Ayuntamiento de Adra que “no sea concedida la licencia de actividad al carecer dicho proyecto de la Autorización de Emisiones a la Atmósfera tal y como establece la Ley”. Dicha resolución debe ser obtenida con carácter previo a la aprobación del proyecto de actuación, tal y como establece la Ley GICA en su artículo 17.2. La propia Delegación de Medio Ambiente también ha comunicado al Ayuntamiento de Adra la carencia en el proyecto de dicha autorización, sin la cual sería una ilegalidad conceder licencia de apertura a la instalación, y sin embargo la empresa Servicios Funerarios Oliver asegura que el proyecto es “legal”.

La Plataforma no entiende cómo este proyecto ha podido ser aprobado por unanimidad del Ayuntamiento de Adra y ser declarado de interés público sin tenerse en cuenta el aspecto más problemático de los crematorios, su alta contaminación. Al contrario de lo que asegura la empresa Servicios Funerarios Oliver, promotora del proyecto, los crematorios están incluidos en el catálogo de actividades potencialmente contaminadoras de la atmósfera en la actividad “cremación” (Anexo B Decreto 74/99 Rgto. Calidad del Aire). Para la Organización Mundial de la Salud es una de las actividades más contaminantes del planeta, y algunos expertos, como Raul Montenegro (asesor de la ONU) extiende la limitación de este tipo de instalaciones respecto de las viviendas en al menos cinco kilómetros.

Por las chimeneas de los crematorios se emiten compuestos como CO, SO2, NOX, HCL, compuestos orgánicos (COT), partículas, metales pesados (especialmente mercurio), además de dioxinas y furanos, entre otros elementos procedentes tanto del cuerpo humano como de los materiales que se incineran junto al mismo. Por ello, la Plataforma no entiende como José Luis Oliver, propietario de Servicios Funerarios Oliver, puede asegurar en la prensa que “el crematorio ni contamina ni despide humo al exterior”.

Sin embargo el alcalde de Huércal de Almería, Juan de las Heras, en un gesto que le honra, trasladó a su Facebook este mismo mes el siguiente comentario: “Os informo que ante las quejas vecinales por emisión de humos y malos olores del Crematorio de la Fuensanta, he solicitado una verificación a la Junta de Andalucía que acredite que las emisiones cumplen con la normativa vigente”. Esto no es un proyecto, es un crematorio ya en funcionamiento al que se opuso el propio Partido Popular en 2006.

Desde la Plataforma se quiere poner punto y final a la proliferación de chimeneas de contaminación sin control y en cualquier parte. Quiere que la ordenación del territorio y términos como desarrollo sostenible sean algo más que verborrea política de personajes que no están capacitados para el cargo que ocupan. Por ello la asociación se opondrá a cuentos proyectos, como el abderitano y el de la capital, quieran instalarse junto a viviendas sin las más elementales medidas correctoras de contaminación. El crematorio de Adra no cuenta ni con el principal, que es la Resolución de Medio Ambiente en el que se especifican las medidas correctoras del humo tóxico de estas fuentes potencialmente contaminadoras de la atmósfera.

La Plataforma denuncia además que el proyecto de crematorio de Adra no presenta Certificación externa de la calidad de las mediciones, instrumentos utilizados, ni trazabilidad de la calidad de la empresa ni de la actividad a la que se dedica. Además, con respecto a las emisiones a la atmósfera que emite la empresa Oliver Servicios Funerarios al Ayuntamiento de Adra, están incompletos por no presentarse la totalidad de las emisiones toxicas que emiten a la atmósfera. En esta línea las emisiones que aporta al Ayuntamiento carecen de certificado de calidad de toma de datos por empresa de Control de Calidad Externa, que certifique la calidad de la toma de datos, calibración de instrumentos para la toma de datos, proceso y seguimiento sobe la toma de datos.

Sin medidores de calidad del aire

Además, en Adra no existe ningún medidor “especial” de sustancias potencialmente contaminantes que así se refleja en Anexo B Decreto 74/99 Rgto. Calidad del Aire. Este medidor deberá tener la capacidad de medir todas las sustancias emitidas en el proceso de cremación así como registrar los valores acumulativos a lo largo del tiempo por considerar que hay metales pesados y toxinas que se acumula en suelo, viviendas cercanas, alimentos vegetales de los invernaderos (la excusa de que los invernaderos tienen plástico no vale pues hay un intercambio permanente atmosférico entre el exterior y el interior de estos).

Un peligro, también para la agricultura

El crematorio no es sólo un peligro para la salud pública a medio y largo plazo de la población. También lo es para el principal sector productivo de la provincia. El futuro crematorio de Adra estará rodeado de invernaderos con estructura plana, también llamados tipo parral, que son especialmente susceptibles a que el material vegetal u hortalizas en su interior sean contaminadas, pues el plástico se encuentra con alta densidad de perforaciones para permitir la entrada de agua de lluvia (junto con las toxinas que habrá en la superficie, además del intercambio atmosférico). Esto es un caldo de cultivo explosivo para que terceros países competidores de los productos de Almería publiquen reportajes en todo tipo de medios en los que se vea cómo los productos hortícolas de la provincia están siendo contaminados con toxinas, dioxinas, metales pesados, etc”. Menuda sensatez por parte del ayuntamiento.

Por todo ello, desde la Plataforma se quiere poner un poco de sensatez a la hora de aprobar proyectos generadores de una gran contaminación como los crematorios. Si existen, porque así lo demanda la sociedad, no pueden estar en cualquier sitio ni de cualquier forma. Deben estar territorialmente ordenados, ubicados en zonas incompatibles con el uso residencial, y con todas las restricciones para emisión de contaminantes a la atmósfera que la técnica permita. Todo lo demás es demagogia, ignorancia, defensa de intereses empresariales por encima del interés general, y mala fe.

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