El Príncipe de Gales y el Príncipe de Asturias, acompañados por la ministra de ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, asistieron en Madrid al taller titulado «Biocombustibles a base de algas y otras aplicaciones industriales: oportunidades para la colaboración anglo-española», en el que participaron más de 40 investigadores españoles y británicos, entre ellos Roberto García Torrente, director de la Estación Experimental de la Fundación Cajamar.
Organizado por la Embajada Británica en colaboración con la Plataforma Española de la Biomasa, la red británica de transferencia de conocimientos sobre biociencias y Repsol, este taller reunió a un selecto grupo de expertos españoles y británicos de universidades y empresas para compartir sus conocimientos sobre la investigación de las algas y para explorar nuevas oportunidades de colaboración bilateral.
Durante el desarrollo de la jornada de trabajo se expusieron dos líneas principales de trabajo en el área de las microalgas. Por un lado, los investigadores ingleses están más orientados a la obtención de elementos nutraceuticos de alto valor que puedan ser incorporados a la industria farmacéutica, cosmética y de la alimentación. Por otro lado, en España son las grandes empresas energéticas las que están dedicando mayores recursos a la investigación y el desarrollo de procesos para la obtención de biocombustibles a partir de microalgas.
La Estación Experimental de la Fundación Cajamar tiene una amplia experiencia, a través del trabajo que se ha desarrollado conjuntamente con el departamento de Ingeniería Química de la Universidad de Almería, en las dos líneas de investigación que se estuvieron analizando.
Especialmente significativos son los trabajos realizados con una cepa, identificada por los investigadores de ambas instituciones, y que se bautizó con el nombre de “Scenedesmus almerienses”. Esta alga es rica en luteína, componente que está siendo muy utilizado en la industria nutraceutica y cuyo mercado a nivel mundial se valoró en este taller en más de 160 millones de dólares, solo por detrás de otros dos componentes como son las Astaxantinas y los Betacarotenos, con unas ventas mundiales conjuntas de más de 600 millones de dólares.
Los prototipos disponibles en la Estación Experimental de la Fundación Cajamar son de los más completos y de mayor dimensión que existen en centros de investigación especializados en microalgas, lo que ha despertado el interés de varios los investigadores asistentes para el desarrollo de futuros proyectos de colaboración.
