Loable y muy interesante la propuesta por parte de diversos colectivos sociales de solicitar a la UNESCO que declaren al barrio de la Chanca “Patrimonio cultural e inmaterial de la humanidad”. Estoy convencido, como chanqueño que la calidad humana de los habitantes de este milenario barrio almeriense, es de mucho nivel. Aunque algunos no lo hayan percibido, en la Chanca se vive con alegría, a pesar de las dificultades laborales y económicas.
Quienes conocemos muy bien la intrahistoria de este espacio de convivencia, de seres humanos curtidos por la mar, aventureros del saber vivir; del chato de vino, de tertulias marineras, de carnavales y cantes jondos, con sentimientos profundos de pesares en alta mar. Quienes nos hemos bañado en la interculturalidad, en la enriquecedora convivencia de la diversidad de los chanqueños, sabemos que nos hemos alimentado de un conocimiento muy especial.
Con el paso de los años, pongo en la balanza de mi aprendizaje: el que adquirí estudiando hasta acabar la diplomatura de relaciones laborales; y lo aprendido en el vivir, del día a día, de un chanqueño. Tengo muy claro que una de mis mejores aptitudes profesionales: “la creatividad”, se la debo a mis vivencias enriquecedoras en la Chanca.
No sólo los artistas chanqueños del flamenco han adquirido el patrimonio inmaterial de la CREATIVIDAD, les puedo asegurar y demostrar, que todas las personas que hemos nacido y criado en la Chanca, podemos presumir de contar con un gran patrimonio; el patrimonio del “SABER VIVIR LA VIDA”, a pesar de las dificultades que nos presenta. Y además, desde mi punto de vista, lo más importante, sabemos DAR nuestro patrimonio inmaterial “del saber vivir” a todo ser humano que lo necesite con EMPATÍA Y SOLIDARIDAD.
¡Cuánto le debo a la Chanca! La singularidad de los chanqueños merece el reconocimiento de la UNESCO como patrimonio inmaterial de la humanidad. Los chanqueños estamos acostumbrados a que nos valoren fuera de nuestra tierra (Almería), a que vengan gentes de otros lugares a apreciar nuestro gran patrimonio humano, social, y artístico. A que nos entrevisten investigadores de universidades sobres nuestros proyectos innovadores. Pero también estamos inmunizados ante actitudes discriminatorias, llenas de egocentrismo institucional. Sabemos superar las dificultades que nos plantean, quienes desde el poder, piensan que somos conformistas. Quien de verdad conoce el patrimonio inmaterial de la Chanca, sabe que somos expertos en “LA LUCHA” de la vida”. Muy trabajadores y con mucha perseverancia, no desistimos de reivindicar nuestros derechos ciudadanos: laborales, económicos, y sociales.
