El profesor de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) Juan J. Jiménez ha dirigido un estudio sobre la situación de la micro, pequeña y mediana empresa familiar de Albacete, del que se desprende que mayoritariamente -en un 85 por ciento- se trata de una micro o pequeña empresa, dirigida por hombres y sin tener preparada la sucesión ni protocolo.
Así lo ha revelado el autor de este trabajo, resultado del convenio entre la consultora AUREN y la UCLM, en el que colaboran las empresas DocuWare, iMedia Comunicación y Resul+ing.
El presente informe ha sido realizado durante el año 2023 a una muestra de empresas familiares de la provincia de Albacete, cuyas conclusiones apuntan a que el perfil tipo se corresponde con una micro o pequeña empresa (85,5%), que es sociedad limitada (75,4%), de menos de 60 años de antigüedad, mayoritariamente entre 21 y 40 años (57,2%).
El estudio apunta a que este tipo de empresa se dedica al sector Servicios en un (49,3%) o Industria (35,5%), en las que la propiedad la detenta la primera generación (43,5%) o la segunda (42,0%), pero la dirección está desempeñada por la segunda (47,8%) o la primera generación (33,3%), “dándose una relación positiva entre la generación al frente del negocio y la dimensión del mismo”, señala el profesor.
En cuanto a la dirección empresarial, se concluye que es mayoritariamente masculina (76,1%), con una edad media de 51 años, 24 años en el cargo y miembro de la familia (90,5%). La formación es mayoritariamente de Bachillerato o Formación Profesional (34,1%) o licenciatura, ingeniería o grado universitario (31,9%), dándose igualmente una relación positiva entre la formación de la dirección y la dimensión de la empresa.
Se contempla igualmente que el mayor grado de parentesco en la dirección respecto a la propiedad mayoritaria es el de hijo(s)/a(s); que la propiedad del 100% capital es mayoritariamente familiar (76,8%); y en cuanto a la importancia de la implicación familiar en la empresa (familiness: influencia que ejercen los valores familiares en el funcionamiento y desarrollo de la empresa), se valora de un modo muy alta (76,9%), especialmente la preocupación por el futuro de la empresa, el apoyo de la familia a la empresa y el sentido de pertenencia.
En cuanto a los órganos de gobierno de la familia, la mayoría no cuenta con ellos (76,1%), ni tiene un protocolo familiar. En los casos en los que sí existe, no está escrito (84,8%). En la mayoría de las empresas no se han fijado criterios para la sucesión (82,6%), y en los casos en los que sí, se prima la pertenencia a la familia (42,9%), sobre la formación requerida (31,4%) o tener experiencia laboral o directiva previa (25,7%). En la mayoría de los casos, aún no se ha producido la sucesión (70,3%) y en las empresas que sí la han realizado ha sido con miembros de la familia (97,6%) y mediante herencia (46,4%), venta (28,6%) o donación (25,0%).
Durante el desarrollo del trabajo, una vez se confirmó el carácter familiar de la empresa, se pedía información sobre la personalidad jurídica, la dimensión, la antigüedad y el sector de actividad. Asimismo, se incorporaron preguntas sobre la dirección, la formación y el género de los responsables de la empresa, la configuración de la propiedad, la implicación de la familia en el negocio (familiness), concluyendo sobre la existencia de un protocolo de la familia propietaria y sobre la sucesión.
El estudio se completa con preguntas sobre el plan estratégico, la estrategia competitiva de la empresa, la innovación, su presencia en los mercados y su percepción relativa respecto a su situación en el año anterior y respecto a su competencia más directa. Por último, se pidió opinión sobre las ventajas e inconvenientes percibidos por ser una empresa familiar.
Ventajas y desventajas de una empresa familiar
Las principales ventajas percibidas por ser una empresa familiar están referidas a que la condición familiar facilita el desempeño empresarial: sentido de pertenencia, mayor implicación y mayor compromiso con el negocio, mayor confianza y mejor comunicación, facilidad para tomar decisiones, mayor dedicación, flexibilidad horaria, libertad e independencia, valores y objetivos comunes, más motivación o mejor ambiente laboral, entre otros aspectos.
Los principales inconvenientes percibidos ser refieren a cuestiones relativas a la gestión de la empresa: toma autoritaria de decisiones, poca profesionalización, aversión al riesgo, al cambio y a la innovación, excesiva dedicación horaria, falta de financiación, etc. y aquellos derivados de los conflictos y problemas familiares.
Los principales retos y desafíos futuros que se plantean las empresas familiares que han respondido se refieren mayoritariamente a expectativas de mejora y crecimiento.