Una investigación realizada por Ignacio López-Muñoz Martínez, alumno del programa de Doctorado Historia y Arte de la Escuela Internacional de Posgrado de la Universidad de Granada (UGR) y miembro del grupo de investigación «Arte y cultura en la Andalucía moderna y contemporánea», del departamento de Historia del Arte, ha analizado la trascendencia del arzobispo Martín de Ascargorta, una de las figuras más importantes de la Granada barroca, como protector de las artes.
Esta tesis doctoral ha sido dirigida por Juan Jesús López-Guadalupe, profesor del departamento de Historia del Arte de la UGR.
Martín de Ascargorta fue arzobispo de Granada y rector de la Universidad de Granada. Gracias a su trabajo como mecenas, esta investigación ha logrado dar un paso más en el conocimiento de las relaciones entre mentores y artistas en los siglos XVII y XVIII, a la vez que arroja luz acerca del papel de los prelados en la Granada barroca como gestores de la Iglesia, pero también como protectores de las artes.
La investigación, a su vez, ha permitido conocer las principales motivaciones ideológicas del arzobispo-mecenas en el patrocinio de numerosas obras, especialmente en Granada y Córdoba, haciéndose un exhaustivo análisis de las mismas.
López-Muñoz llega a la conclusión de que su principal motivación es ideológica a la par de doctrinal. “El arzobispo reivindicó en su pontificado el pasado paleocristiano en nuestro país y, especialmente, en Granada en un momento de controversia de las reliquias del Sacromonte”, señala. En la tesis doctoral se ha estudiado el doble origen de su financiación: fundamentalmente, tres herencias muy sustanciosas; por otro, el peculio propio del Cabildo catedralicio.
La Catedral de Granada fue la principal beneficiaria de este mecenazgo, pues su definitiva conclusión y ornamentación interior fueron posibles gracias al patrocinio de Ascargorta. El arzobispo también acordó proteger la Abadía del Sacromonte, construyendo un edificio destinado a la creación de un colegio nuevo.
El arzobispo-mecenas poseía una importante colección de arte, que permite estudiarlo en relación a otros principales mecenas de España. Entre los artistas que patrocinó de la época se encuentran el pintor y escultor José Risueño; el artista Hurtado Izquierdo o el escultor Duque Cornejo.
Así, se ha localizado el lienzo “Lázaro y el rico Epulón”, que se creía perdido, en el Museo del Prado y que pertenece a una colección de seis lienzos patrocinados por el Martín de Ascargorta.