Un equipo de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) ha conseguido dar un paso importante en las aplicaciones de la espectroscopia de resonancia magnética nuclear desarrollando una nueva metodología que aumenta el potencial de esta técnica, ampliamente utilizada en los ámbitos de la medicina, la química o la biología, y abre el camino para la futura fabricación de aparatos portátiles.
Esta nueva metodología supera las principales limitaciones de la resonancia magnética nuclear, su poca sensibilidad y la sofisticación y el precio de los equipos comerciales que se usan en la actualidad.
Cómo aumenta el potencial de la resonancia magnética
Frente a esta realidad, el grupo de investigación en Microondas en Química Orgánica Sostenible (MSOC en su acrónimo en inglés) ha demostrado que la iluminación con luz visible de un tipo de detector (denominado microbobinas planas y espirales) permite llevar a cabo experimentos de resonancia magnética nuclear de una forma mucho más rápida, menos costosa y con más versatilidad que algunos de los sistemas presentes en el mercado.
Y lo que es más importante, aumenta la sensibilidad de la resonancia de forma muy notable, lo que implica que son necesarias cantidades menores de muestra que las normalmente empleadas para poder detectar la señal. De hecho, en ciertos experimentos se consigue aumentar la sensibilidad por encima de la obtenida en uno de los equipos más potentes del mercado (y valorado en varios millones de euros).
La prestigiosa editorial Nature se hace eco de un hallazgo desarrollado desde la Facultad de Ciencias y Tecnologías Químicas de la UCLM en el Campus de Ciudad Real y liderado por la profesora María Victoria Gómez Almagro, dentro de su línea de investigación “Microbobinas de RMN y sus aplicaciones”.
Cuál es el potencial de esta tecnología
La propia investigadora justifica el potencial de esta nueva metodología explicando que, gracias a la miniaturización de uno de los componentes principales del sistema, en un futuro, y con más investigación y optimización, “podría emplearse para eliminar limitaciones de los aparatos de resonancia portátiles actuales, abriendo así el campo de aplicación para poder llegar a otros ámbitos, como consultas médicas”.
La profesora Gómez Almagro aparece como primera y principal autora del artículo publicado en Nature Communications con el título de “Multinuclear 1D and 2D NMR with 19F-Photo-CIDNP hyperpolarization in a microfluidic chip with untuned microcoil” (“Resonancia Magnética Nuclear en varias dimensiones combinada con técnicas de hiperpolarización (foto-CIDNP) empleando microbobinas de banda ancha”), desarrollado en colaboración con el grupo de BioNanotechnology de la universidad holandesa de Wageningen. Dentro de esta línea de investigación, la investigadora ya ha contribuido en la misma revista en otras dos ocasiones con los artículos “Pushing nuclear magnetic resonance sensitivity limits with microfluidics and photo-chemically induced dynamic nuclear polarization” y “Multinuclear nanoliter one-dimensional and two-dimensional NMR spectroscopy with a single non-resonant microcoil”, también en colaboración con el profesor Aldrik Velders, de la Universidad de Wageningen.