El nivel de innovación alcanzado por la multinacional almeriense Cosentino es paradigmático. Esta empresa ha sabido poner en valor el talento, la ambición y las ganas de superarse, para liderar el mercado global de superficies con su producto estrella: Silestone.
La multinacional almeriense ha avanzado en la seguridad y la sostenibilidad de este producto, gracias al desarrollo desde 2018 de su tecnología HybriQ, que le ha permitido alcanzar tablas que ya se comercializan en las que se ha reducido la presencia de sílice cristalina por debajo del 50 por ciento. Pero el objetivo para este 2023 es más ambicioso, ya que se espera lograr reducir un 10 por ciento más la presencia de este compuesto, gracias al proyecto Free Advanced, en el que la empresa trabaja junto a la Universidad de Almería, en el marco de una Unidad de Innovación Conjunta (UIC).
Qué importancia tiene la reducción de la proporción de sílice cristalina
La reducción de la proporción de la sílice cristalina en las planchas de Silestone es clave para mejorar aún más la seguridad del personal que trabaja tanto en su producción, como en la posterior manipulación del material, para convertirlo en las superficies que dan color a cocinas de todo el mundo. Y todo, porque en el proceso de corte y transformación del Silestone, al igual que sucede con otras piedras de origen silíceo, se desprenden estos cristales que pueden entrar en las vías respiratorias, si los trabajadores no cuentan con las medidas de protección adecuadas, y causar lesiones.
La preocupación por la mejora de la seguridad de Silestone es tal, que la empresa ya ha realizado ensayos con materias sintéticas, en los que se ha logrado reducir la presencia de la sílice cristalina a tan solo el diez por ciento, explica la directora de Investigación y calidad MMPP Silestone, Paz Carreras.
Cómo se mejora la sostenibilidad de Silestone
Del mismo modo, Cosentino trabaja en la mejora de la sostenibilidad de su producto, algo que logra con el uso de materiales reciclados. Nuevos componentes que se incorporan a Silestone a modo de materia prima procedente de la valorización de los propios restos de tablas o de lodos, así como materiales de desecho de la minería de la piedra natural y también de empresas cristaleras.
En esta nueva aventura, Cosentino no camina solo, sino que lo hace de la mano de la Universidad de Almería, a través de la UIC, en la que el campus almeriense ofrece su experiencia en ingeniería de materiales, química fundamental, toxicología, ingeniería de procesos de fabricación y ciencias estadísticas aplicadas al diseño de experimentos y al análisis de sus resultados; un apoyo indispensable para que los especialistas en ciencia de materiales de la empresa radicada en Almería puedan desarrollar un producto todavía mejor.
Qué líneas lidera la UAL en la mejorara de la sostenibilidad y seguridad de Silestone
El equipo de la Universidad de Almería, liderado por el catedrático en química orgánica, Ignacio Fernández de las Nieves, trabaja en varias líneas. Por un lado, en la investigación sobre la síntesis de resinas de poliéster para el aglomerado de mineral que se emplea en la fabricación de Silestone y, que en el marco de este proyecto, es nuevo, ya que incorpora materias primas recicladas, bien residuos de la propia compañía Cosentino, resultantes de la fabricación de las tablas o restos de lodos, así como materias primas de minería del mármol y de empresas cristaleras.
La Universidad de Almería contribuye también a la simulación del proceso de producción con estos nuevos materiales, un trabajo que coordina el catedrático en ingeniería química, Gabriel Acién, y que va dirigido a dar con un modelo de fabricación adecuado para esta nueva generación de tablas de Silestone.
La parte de estadística y de análisis de datos de todo el proceso es la tercera pata de esta colaboración de la Universidad, de la que se encarga el catedrático en matemáticas, Antonio Salmerón.
Por su parte, Cosentino Research & Development, empresa perteneciente al Grupo Cosentino que concentra su actividad de I+D, asume el reto y los objetivos del acceso a sus procesos y tecnología industrial para experimentación, así como la disposición de personal especialista con gran experiencia en la investigación y desarrollo de los materiales aglomerados, tal y como se ha logrado con la tecnología HybriQ.
Cómo se ha logrado esta alianza
Esta alianza entre la Universidad de Almería y Cosentino se enmarca dentro de la pionera figura de la UIC, auspiciada por el ‘Programa de Liderazgo en Innovación Abierta, Singular y Estratégica’ promovido y financiado por la Consejería de Transformación Económica, Industria, Conocimiento y Universidades de la Junta de Andalucía, a través de la Agencia IDEA. Se trata de una de las primeras experiencias bajo este formato de Almería y cuenta con la singularidad de que ambas entidades comparten riesgos y recursos de forma paritaria, para avanzar en este reto de innovación industrial.
“Para Cosentino se trata de un proyecto muy ilusionante. Siempre hemos soñado con una colaboración que permita combinar el conocimiento de la Universidad con la capacidad de la empresa de crear valor a partir de éste. Esta colaboración nos va a permitir, además, reforzar los lazos de Cosentino con la UAL, formando un talento que se incorpore de manera natural a la empresa realimentando así la colaboración. Nuestro objetivo es crecer de manera conjunta con la Universidad. Un círculo virtuoso que lleve a más conocimiento, más valor y creación de riqueza para nuestra provincia”, ha indicado Valentín Tijeras, director de Producto e Innovación de Grupo Cosentino, en su intervención durante la presentación del proyecto.