Los deportistas que controlan el estrés tienen un mejor rendimiento deportivo. Así lo han demostrado investigadores de las universidades de Málaga, Sevilla, Jaén y Granada, en un estudio conjunto en el que han analizado la influencia del entrenamiento psicológico en la mejora del rendimiento deportivo.
El proyecto ha sido liderado por la especialista en Psicología del Deporte de la Universidad de Sevilla, Gloria González, que revela que los futbolistas que cuentan con la habilidad psicológica de controlar el estrés, mantienen elevada la autoconfianza y una buena capacidad de atención-concentración durante la competición.
Para su realización, se ha contado con una muestra de 100 jugadores de fútbol semiprofesionales de la categoría de tercera división de fútbol español, en la temporada 2015/2016, de las provincias de Sevilla y Jaén, con edades que oscilan entre 17 y 24 años.
“En estas categorías, el control del estrés está suficientemente modulado, de manera que no suelen existir estados altos de ansiedad, debido a que son futbolistas que previamente han superado filtros de afrontamiento deportivo”, explica el profesor de la Facultad de Ciencias de la Educación de la UMA, Óscar Romero, quien añade, además, que son deportistas con una alta confianza, capaces de mantener concentración ante los estímulos relevantes del juego.
No obstante, según la investigación, aunque los deportistas considerados muestran altos niveles de atención, cuando comenten un error, manifiestan un descenso de esta habilidad psicológica. Los expertos, en este sentido, ponen en valor la figura del entrenador para fomentar la motivación de los jugadores.
Igualmente, estudios anteriores coinciden en que el rendimiento deportivo de los futbolistas difiere en función de su demarcación, de manera que los delanteros y centrocampistas destacan en poseer una estimulación más alta que jugadores de otros puestos de juego.
Este proyecto se ha desarrollado en el marco del Grupo Hum-796 del Departamento de las Lenguas, las Artes y el Deporte de la Universidad de Málaga.
