Investigadores almerienses realizan un estudio pionero: tratan de desarrollar una metodología para estimar la evolución de los acuíferos costeros, según el ritmo de captación de agua de mar al que son sometidos para su desalación. Al mismo tiempo, prevén realizar pequeñas modificaciones en la cuenca baja del río Andarax, con el objetivo de mejorar la recarga del acuífero costero y favorecer la infiltración del agua de lluvia.
La provincia de Almería, y en general el sureste y levante español, se caracterizan por la presencia de áreas semiáridas donde el elemento líquido es el factor limitante del desarrollo local y provincial, además de suponer los escenarios más vulnerables a las variaciones climáticas.
Teniendo en cuenta datos del último informe del Grupo de Expertos de la ONU sobre el Cambio Climático, realizado en 2007, se prevé un incremento de la temperatura que conlleva importantes desarreglos en el esquema hídrico, asociados a un aumento de los problemas de escasez de agua, que afectarán, tanto directa como indirectamente, a una quinta parte de la población mundial.
En esta línea, investigadores almerienses del grupo Recursos Hídricos y Geología Ambiental de la UAL, realizan un estudio pionero: tratan de desarrollar una metodología para estimar la evolución de los acuíferos costeros según el ritmo de explotación al que son sometidos.
Este trabajo se basa en el análisis de las diferentes interfases que se diferencian verticalmente en dichos acuíferos: agua salada, zona de transición y, en superficie, el agua dulce. Y es que según las características químicas del agua a tratar para su desalación, puede hacer que el proceso de potabilización salga más o menos rentable.
Antonio Pulido, investigador principal del proyecto Dinámica del contacto agua dulce -agua salada en acuíferos detríticos costeros sometidos a bombeos intensivos, financiado por el Ministerio de Educación y Ciencia con 112.000 euros, expone: "El objetivo científico reside en saber qué sucede en cada uno de estos dominios de los acuíferos costeros -franja de agua de mar, franja de transición y franja de agua dulce- y medir las consecuencias de una acción que se pretende aplicar en muchas partes del mundo.
La relevancia estriba en que la desalación del agua a través de la tecnología de membranas es la medida que se ha adoptado para intentar resolver los problemas de escasez de agua. Esta problemática es común a las zonas áridas y semiáridas, y a las áreas con grandes demandas." […]
Descargar artículo entero nº 36 – Energía Solar contra las plagas. Mayo 2008