La Universidad de Almería ha acudido a la llamada de Gabriel García, funcionario de vigilancia en el Centro Penitenciario El Acebuche, para sumarse a un programa específico de reeducación y reinserción social. En concreto, los 25 internos de la llamada Unidad Terapéutica han participado en un taller de realidad virtual impartido en junio por el profesor del Departamento de Matemáticas José Luis Rodríguez, junto a Diego Cangas, que además de ser un estudiante de Ingeniería Informática en el campus almeriense es CEO de la spin-off Virtual Dor.
La actividad ha sido catalogada como “un gran éxito, porque los internos por un rato se sintieron libres, como en la calle”, por parte del propio García, que ha explicado las peculiaridades de este módulo dentro de la prisión: “Es una unidad especial en la que hay unas reglas muy especiales de compromiso personal, de no a las drogas, de no a la violencia, de intento de cambiar de hábitos y de vida… es una unidad que aquí está muy mimada”.
Tras una breve introducción sobre realidad virtual, realidad aumentada y mixta, tanto José Luis Rodríguez como Diego Cangas les han explicado a los presos algunas de las aplicaciones que estas nuevas tecnologías emergentes tienen en distintos ámbitos de la sociedad, y han presentado su software educativo ‘Neotrie VR’. Destacado es que esta ha sido la primera vez que internos de esta unidad han probado la realidad virtual totalmente ‘inmersiva’, por lo que “el impacto inicial ha sido impresionante”, según ha resaltado Rodríguez. El escenario virtual diseñado en ‘Neotrie’ es un templo griego, rodeado de un pequeño bosque y mar, donde los internos han podido crear y manipular algunos objetos geométricos y modelos 3D utilizando los mandos de los equipos de realidad virtual; “La sensación ‘inmersiva’ es alucinante”, ha comentado uno de los internos.
A diferencia de otros softwares estándar, “’Neotrie VR’ permite visionar y también editar objetos 3D directamente en realidad virtual, tanto para su estudio como para su posterior implementación en otros softwares o entornos, impresión 3D o realidad aumentada”, ha explicado Cangas a los presos, muy interesados y atentos. De este modo, han podido adentrarse en las figuras, o volar sobre ellas y sobre todo el escenario virtual, mostrando una gran emoción. “Esta actividad les ha gustado muchísimo, como una actividad que se puede desarrollar en la calle y que aquí, gracias al esfuerzo de José Luis Rodríguez y Diego Cangas, que han traído el material y el equipo, ha supuesto que los internos lo hayan pasado muy bien y hayan salido de su rutina”, ha concretado Gabriel García, que ha añadido que “este tipo de acciones tienen el sentido precisamente de que se cambie la rutina carcelaria por hábitos saludables o actos que sean interesantes para su puesta en libertad, ya que realmente aquí lo que tienen restringido es su libertad, pero las actividades lúdicas, formativas o sociales no están restringidas para que se acostumbren a hacer cosas que en la calle se pueden hacer normalmente”.
Actualmente, ‘Neotrie’ se está utilizando en más de 130 centros educativos de todo el mundo y cuenta con más de 1.300 usuarios en la conocida plataforma de videojuegos Steam. El equipo de colaboradores está formado por más de una veintena de profesores y de estudiantes de Grado, Máster y Doctorado de varios países, incluidos Polonia, Holanda, Francia, Alemania y España, que trabajan conjuntamente para diseñar y validar actividades de Geometría que son aplicables a diferentes niveles educativos. La próxima actualización de ‘Neotrie’, que también ha probado los internos en esta UTE de El Acebuche, suma nuevas funcionalidades que permiten al profesorado de Matemáticas interaccionar con el de otras materias, como Geografía, Química o Música. Así, gracias a la nueva implementación de entornos 360 en el juego, se puede tomar medidas en los monumentos como la Sagrada Familia o la Alhambra, diseñar moléculas o redes cristalinas con las herramientas geométricas disponibles, o visualizar escalas armónicas, combinando música y geometría como en la escuela pitagórica.
Sin duda, “la realidad virtual ha dejado huella en El Acebuche”, expresión con la que el profesor Rodríguez ha mostrado su satisfacción: “Los internos han visto de primera mano el potencial y las posibilidades que ofrece la realidad virtual y, como no, han podido evadirse también por unos breves momentos”. Como ha comentado otro de los presos participantes en el taller, “ha sido un rato de estar en libertad fuera de estos muros”.