El ministro de Ciencia, Innovación y Universidades, Pedro Duque, y el rector de la UNED, Ricardo Mairal, presidió hace unos días el Acto de Apertura del Curso Académico 2019-2020. El ministro puso en valor el dinamismo y la calidad de las universidades españolas, entre ellas la UNED, a la que calificó de “un organismo imprescindible de cohesión y de igualdad de oportunidades y que garantiza la formación a lo largo de la vida y la equidad territorial”.
El rector expuso el Plan Estratégico 2019-2022 que “consta de 131 puntos, la mitad de los cuales ya están en marcha, encaminados a la digitalización, la internacionalización y la proyección social de nuestra universidad”. Entre las numerosas medidas citadas, destacó la creación del el Observatorio de Objetivos de Desarrollo Sostenible para promover la inclusión social, la responsabilidad medioambiental y la lucha contra el cambio climático. Durante el acto se impuso la Medalla de la UNED al Mérito al anterior rector, ahora secretario de Estado de Educación y Formación Profesional, Alejandro Tiana, y se escuchó la lección inaugural del catedrático de la ETS de Ingenieros Industriales, Eugenio Muñoz Camacho, sobre la Interrelación obligada entre química, medio ambiente y riesgos en el ámbito de la Ingeniería. En la mesa inaugural, Esther Souto, vicerrectora primera; el ministro Duque; el rector Mairal; el presidente del Consejo Social de la UNED, Francisco Javier García, y la secretaria general, Rebeca de Juan.
El ministro de Ciencia, Innovación y Universidades, Pedro Duque, destacó el liderazgo de las universidades españolas entre sus homónimas europeas, pero también subrayó la necesidad de una nueva Ley de Universidades orientada hacia “un nuevo marco de gobernanza institucional, que permita impulsar la internacionalización, habilitar mecanismos para atraer tanto a jóvenes investigadores como a científicos consagrados, o favorecer el papel de las universidades como motor de las economías regionales y de sus tejidos productivos”. Se refirió a la UNED como “un organismo imprescindible de cohesión y de igualdad de oportunidades y que garantiza la formación a lo largo de la “vida y la equidad territorial”. Y se comprometió a mantener la colaboración entre ambas instituciones: “no duden que seguiremos apoyando la formación de calidad que oferta, la investigación que desarrolla y la transferencia de conocimiento que realiza”.
El ministro también ha felicitado a Alejandro Tiana como receptor de la Medalla de la UNED al Mérito. “Se que es un honor ser rector de una universidad, y dejar de serlo para dedicarse a la Educación de España es muy meritorio”.
El rector, Ricardo Mairal, se ha dirigido Pedro Duque, “como ministro, que es la autoridad que nos supervisa y tutela·, pero además “como miembro de nuestra comunidad académica, en su condición de doctor honoris causa”. Le ha recordado la infrafinanciación pública que recibe la UNED “que apenas alcanza el 40 %, mientras que en el resto de las universidades es de un 70 %”. Y le ha pedido “una apuesta más decidida por nuestro proyecto, dotándola de los mejores medios económicos y del capital humano consolidado que sean posibles. Con la certeza de que nunca le vamos a defraudar”.
Mairal presentó una UNED en pleno proceso de modernización, dispuesta a afrontar la nueva década como “la del pensamiento crítico, del conocimiento ilustrado y de la construcción de un saber solidario”, y armada con un Plan Estratégico 2019-2022 “preparado para afrontar los cambios y responder a los retos que se avecinan: crisis climática, migraciones, cerebro humano, advenimiento del 5G, igualdad de género, un planeta hiperconectado…”. Un plan que “consta de 131 acciones, más de la mitad ya en curso”, cuya arquitectura se basa en tres ejes, “la digitalización, la internacionalización y la proyección social. La digitalización y la innovación suponen “el uso de las técnicas de Inteligencia Artificial que establecen nuevos escenarios de enseñanza y aprendizaje basados en las necesidades de nuestros estudiantes y que afectan a la enseñanza, la investigación y la gobernanza”. Una transformación tecnológica e hiperconectividad en la que se aplica ya la minería de datos para desarrollar entornos de aprendizaje personalizados, se apuesta por la innovación, la accesibilidad y la inclusión.
El rector ilustró la capacidad de respuesta de la UNED a los nuevos retos sociales, como el de “la España vaciada, para frenar la despoblación de las zonas apartadas o rurales, cuyos habitantes se ven obligados a emigrar, entre otras cosas para poder acceder a la educación. La UNED actúa ahí como una auténtica resistencia que dignifica lo local y lo abre a la universalidad del conocimiento”. O el “plan de fortalecimiento internacional, cooperación y ODS que ha sido pionero, para fomentar la cooperación con otras universidades y países”. O, especialmente, la creación del Observatorio de Objetivos de Desarrollo Sostenible para promover la inclusión social, la responsabilidad medioambiental y la lucha contra el cambio climático”.
Una ceremonia para estudiantes de 112 nacionalidades
La ceremonia, emitida por Canal UNED en directo y que puede verse también en diferido, comenzaba con la lectura de la Memoria del Curso Académico 2018-19 por parte de la secretaria general de la UNED, Rebeca de Juan. “Estamos inmersos en un ambicioso empeño de modernización. La revolución digital es imparable y exige de todos nosotros una adaptación en los modos de trabajar, gestionar, enseñar, comunicar y difundir”. Presentó los datos del curso anterior en formato audiovisual, elaborado por el equipo de Centro de Medios Audiovisuales de la UNED (CEMAV), del que destacó algunos datos: los más de 140.000 estudiantes, procedentes de112 nacionalidades y los 15 países de Europa, América y África donde está presente la institución.
La lección inaugural, a cargo del catedrático del departamento de Ingeniería Eléctrica, Electrónica, Control, Telemática y Química Aplicada a la Ingeniería, Eugenio Muñoz, versó sobre la mala imagen que tiene la Química en general y los químicos en particular en la sociedad, a la que se ha referido como “quimiofobia”, frente a la excelente consideración de la que gozan los ingenieros y que ha definido como “ingenierofilia”, términos generados erróneamente, aseguró, por la percepción en positivo de la “encomiable labor de ingeniería en seguridad y defensa del medio y de sus trabajadores”, y la negativa “apreciación del ciudadano medio, que suele temer, por desconocimiento, los efectos nocivos y altamente peligrosos de los productos químicos”.
Tras la toma de posesión de sus plazas de los nuevos profesores titulares y catedráticos, se impuso la Medalla de la UNED al mérito a Alejandro Tiana, anterior rector y actual secretario de Estado de Educación y Formación Profesional, que la recibió recordando sus 39 años de trabajo como profesor, con distintas responsabilidades, y que calificó “un honor solo comparable al que tuve trabajando como rector de esta universidad durante cinco años”.
