La Universidad de Almería (UAL) muestra ‘Palestina, una mirada a su historia’, de Sergio Almisas. Esta exposición, que puede visitarse en el Aulario II, está compuesta por un total de 16 paneles informativos que realizan un recorrido por la historia y la evolución social, económica y política de Palestina.
Así, va “desde la incidencia de la Nakba a las políticas israelíes de apartheid indicadas por la ONU, referentes al bloqueo a Gaza, a la ampliación del muro de Cisjordania, a la tercera intifada, a la detención sistemática de menores o a las intervenciones contra la Marcha del Retorno”, según explicó la propia Universidad de Cádiz en el momento de su lanzamiento.
La exposición está organizada por el colectivo ‘Plataforma UAL Palestina’, como parte de la RUxP, la Red Universitaria por Palestina, unido a BDS Almería. El contenido ha sido cedido por la Asociación de Estudios Históricos e Intervención Social ‘Lumbre’.
Coincidiendo con el minuto de silencio que todos los días organiza el colectivo ‘Plataforma UAL Palestina’, se aprovechó para hacer un acto de presentación de esta exposición, en el que se volvió a denunciar “el genocidio en Gaza, así como las matanzas en Cisjordania y el ataque criminal de Israel contra el Líbano”. También se hizo un llamamiento a la movilización, contando con la participación de un centenar de personas, la gran mayoría alumnado de la UAL. Se hizo hincapié en la necesidad de “conocer la historia para entender qué sucede en Oriente Próximo y, sobre todo, en Palestina”, y el papel que juega la universidad.
En ese sentido, Margarita Asensio, profesora de Didáctica de la Lengua y la Literatura, explicó que “las aulas universitarias deben servir para forjar mentes críticas, capaces de cuestionarse las injusticias y de promover la conciencia social”, así como para “la preservación de los Derechos Humanos, el Derecho Internacional, la paz, la tolerancia, el respeto por la dignidad, la justicia y la no impunidad a través de la educación, la investigación y la acción colectiva”. Añadió la necesidad de “contribuir a construir un mundo más justo y humano, donde el genocidio y la violencia sean rechazados de manera contundente y, en última instancia, estos no sean posibles”.