La Universidad de Málaga cuenta con una nueva infraestructura científica para el diagnóstico y tratamiento magnético de enfermedades cancerígenas. Se trata de un equipamiento de hipertermia magnética pre-clínica, único en Andalucía, que se ha incorporado al Centro Andaluz de Nanomedicina y Biotecnología (BIONAND).
La hipertermia magnética es una técnica basada en la respuesta de nanomateriales a campos magnéticos de alta frecuencia, que permite, entre otras aplicaciones, realizar terapias localizadas con bajos o incluso nulos efectos secundarios.
“Los investigadores podrán evaluar in vitro la eficiencia de la conversión de energía electromagnética en calor de nuevos nanomateriales y, además, llevar a cabo terapias avanzadas in vivo en modelos pre-clínicos”, explica el catedrático de Química Orgánica de la UMA Ezequiel Pérez-Inestrosa, director científico de BIONAND.
Esta nueva infraestructura se complementará con un equipo magnetómetro de muestra vibrante (VSM), que se instalará en los próximos meses, dando como resultado un servicio innovador, que se sumará a los equipos de imagen pre-clínica ya establecidos en BIONAND, permitiendo a los científicos desarrollar nuevas nanoplataformas teranósticas -diagnóstico más terapia-, con importantes beneficios para el ámbito clínico.
El sistema de hipertermia magnética se ha instalado en la Unidad de Nanoimagen de BIONAND, una ICTS -Infraestructura Científico Técnica Singular- integrada en NANBIOSIS, de la que forman parte científicos especializados en el desarrollo de agentes de contraste para diagnóstico por imagen de determinadas enfermedades. La doctora García-Martín lidera esta unidad del Centro Andaluz de Nanomedicina y Biotecnología.
Con un presupuesto de más de 211.000 euros, los fondos para incorporar esta infraestructura proceden del Subprograma Estatal de Infraestructuras de Investigación y Equipamiento Científico-Técnico (Plan Estatal I+D+i 2017-2020), del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, cofinanciados por Fondos FEDER.