La música de Manuel de Falla está muy presente en las ponencias y talleres del curso organizado por la Universidad de Almería. Los alumnos analizan una de sus obras más representativas ‘El sombrero de tres picos’.
Cuarto día del curso ‘Dirección de orquesta, banda y wind ensemble’ dirigido por los profesores Nayden Todorov, Pieralberto Cattaneo, José Miguel Rodilla y Juan José Navarro Hernández. Los dos últimos días están dedicados a la figura de Manuel de Falla.
El catedrático de Dirección de Orquesta del Conservatorio Superior de Música de Murcia, José Miguel Rodilla, abordó en su ponencia la música española para orquesta, con especial énfasis en su obra ‘El sombrero de tres picos’ que está considerada una de las más importantes del autor andaluz “quizá sea el compositor más representativo de la música española a nivel internacional“. Analizó la dos suite del ‘Sombrero de tres picos’, “tal vez la obra a nivel internacional más conocida, no podemos decir que la más completa, porque cada una de sus obras son muy completas y precisas, pero sí la más conocida y representativa del compositor gaditano; una obra que enfocada a la dirección de orquesta, al curso que nos ocupa, es una obra de repertorio que en la formación de cualquier estudiante de dirección de orquesta tiene que aparecer”.
Rodilla ha coordinado, además, el Taller de preparación con la Almeraya Symphony Orchestra, que es la orquesta que está participando como orquesta piloto en este curso dirigido a alumnos de toda España “somos cuatro los profesores que dirigimos el curso desde el lunes, cada uno en una sección diferente, en mi caso los dos primeros días los he dedicado a la preparación de la orquesta, los alumnos han asistido a los ensayos para ver de qué manera un director profesional trabaja una orquesta y va preparando de principio a fin estas obras que ellos después van a trabajar o están ya trabajando con otros profesores y dirigir la orquesta en las prácticas”.
El músico valenciano, intenta que la comunicación fluya con los alumnos “por un lado los profesores queremos que haya comunicación entre nosotros y los alumnos, y por otro, deseamos que esa comunicación se la puedan transmitir ellos a la orquesta cuando la tengan que dirigir, obviamente cuando los alumnos suben a la tarima para dirigir están nerviosos y la comunicación es difícil… pero bueno todos hemos pasado por ahí en la época de estudiantes y es necesario que vivan ese momento, es una parte de su formación muy importante”.