Málaga cuenta con el primer Plan Transversal por la Convivencia y la Radicalización Violenta, para cuya elaboración y puesta en marcha se ha trabajado conjuntamente con la Universidad y con el Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) del Ministerio del Interior.
El alcalde de la capital, Francisco de la Torre, y el rector de la UMA, José Ángel Narváez, han suscrito un convenio de colaboración para la realización de actividades académicas y formativas en este Plan Transversal, y dotar con ello de un soporte científico a las acciones que contempla. En la comisión universitaria nombrada por el rector para participar en este proyecto están la catedrática de Derecho Internacional, Magdalena Martín; el defensor universitario, Manuel Montalbán, y el profesor de Sociología, Luis Ayuso, vicepresidente a su vez del Centro de Investigaciones Sociológicas.
Este proyecto ha sido presentado en el Salón de los Espejos del Ayuntamiento, en un acto al que han asistido, entre otros, el jefe de Área de Estrategia y Prospectiva del CITCO, José Luis Serrano, y el jefe de Sección de esta misma entidad, Tomas Santamaría, dependiente del Ministerio del Interior. De hecho, Málaga ha sido elegida por el Gobierno de España como ciudad piloto para la implementación del Plan Estratégico Nacional de Lucha contra la Radicalización Violenta.
Ejes de actuación
El I Plan Transversal tiene como finalidad sensibilizar y construir una ciudadanía activa y resiliente, que favorezca la cohesión social, mejore la convivencia, respete la libertad religiosa y de culto y evite la marginalización y el radicalismo violento.
Para su desarrollo se fijan dos objetivos principales. En primer lugar, el desarrollo de estrategias transversales de prevención de la radicalización violenta para hacer de Málaga una ciudad más segura y resilente; y, en segundo lugar, poder expandir sus buenas prácticas y conseguir objeticos conjuntos de interculturalidad, tolerancia, respeto religioso o respeto a las diferencias y creencias.
El Plan por la Convivencia y Prevención de la Radicalización Violenta se articula en 9 ejes de actuación que prevén el desarrollo de 245 acciones y medidas concretas.
Estas líneas maestras sobre las que pivota el Plan son:
- Eje 1. Prevención e intervención programada
- Eje 2. Actuaciones y cooperación institucionales
- Eje 3. Sensibilización y formación
- Eje 4. Igualdad entro géneros y promoción de las mujeres musulmanas en el ámbito social, cultural, sanitario y productivo
- Eje 5. Mediación social e intercultural
- Eje 6. Gestión de la convivencia, diversidad religiosa y multicultural
- Eje 7. Educción y desarrollo de actitudes y aptitudes en menores y jóvenes
- Eje 8. Comunicación estratégica: internet y redes sociales
- Eje 9. Investigación y análisis.
Se ha estimado que es prioritario desarrollar en primer lugar los Ejes 1, 2 y 5 como elementos en los que se sustente el desarrollo posterior de todas las medidas contempladas.
Órganos de trabajo
Ya se han creado 4 órganos de trabajo que harán posible el desarrollo participativo y profesionalizado de este Plan Transversal:
- Agrupación de desarrollo para el Fomento de la Convivencia y la Prevención de la Radicalización Violenta. Se constituyó el pasado mes de abril. Permite el trabajo en red y agrupa a los agentes implicados en esta materia. Ya forman parte de ella la Asociación Codenaf, Asociación marroquí para la integración de los inmigrantes, Asociación Mujer emancipada, Asociación Incide, Málaga Acoge, Accem, Federación de asociación de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales-Andalucía diversidad, Asociación Prodiversa, Movimiento contra la intolerancia, Cruz Roja y Cáritas.
- Grupo Local. También creado en el mes de abril de 2017. Liderado por el Concejal de Derechos Sociales, Julio Andrade, aglutina a las Áreas de Seguridad y Derechos Sociales
- Mesa Técnica de Prevención de la Radicalización Violenta. Integrada por profesionales del Área de Derechos Sociales
- Consejo Asesor. Formado por un grupo de expertos y personal del Foro por la Paz en el Mediterráneo.
La génesis del Plan
El Ayuntamiento de Málaga, en coordinación con el Centro de Inteligencia contra del Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) y el equipo del Plan Estratégico Nacional de Lucha contra la Radicalización Violenta (y basándose en la evaluación de los planes precedentes y la experiencia profesional previa), realiza una primera aproximación al Plan definiendo los ejes en los que se estructura.
Posteriormente se realiza una consulta directa al tejido asociativo de Málaga para contar con sus aportaciones. El documento final fue aprobado por la Junta de Gobierno Local en el mes de marzo de 2017.
La filosofía del Plan
Málaga es una ciudad en las que conviven personas de 150 nacionalidades, siendo un ejemplo de tolerancia, convivencia y respeto mutuo. Sin embargo, ante los fenómenos de radicalización violenta a nivel global de los últimos años, la ciudad afronta el desafío de encontrar mecanismos para adoptar la diversidad al tiempo que mantener su unidad.
Es un reto alcanzar un equilibrio entre las identidades culturales originales de la inmigración y un sentido de pertenencia basado en la aceptación de los valores fundamentales y de las instituciones. Por ello es necesario intensificar el trabajo de social y preventivo con las diferentes generaciones y grupos de inmigrantes.
Cualquier política de lucha contra radicalización deber respetar y fortalecer la diversidad de las comunidades culturales que actualmente existen en Europa. Por ello desde el Ayuntamiento de Málaga se apuesta por la prevención: trabajar y dar oportunidades a todas las personas sin importar raza, procedencia o religión.
Convenio con la Universidad de Málaga
Tanto el Ayuntamiento como la Universidad de Málaga expresan su convencimiento de la necesidad de aunar esfuerzos para el desarrollo de líneas de prevención e investigación que permitan profundizar en el conocimiento de la realidad de Málaga.
Estas acciones preventivas se dirigen a evitar que las personas se unan al terrorismo, trabajando para ello sobre los factores o causas profundas que derivan en la radicalización violenta y el reclutamiento.
Además hay que desarrollar acciones para sensibilizar y construir una ciudadanía activa y resiliente que favorezca la cohesión social, mejore la convivencia, respete la libertad religiosa y de culto y evite la marginalización y el radicalismo violento.
Para ello ambas instituciones colaborarán de forma conjunta en las acciones necesarias, dentro de sus competencias, para la difusión, aplicación e implementación del Plan Transversal por la Convivencia y la Radicalización Violenta.
