Esta medida fue aprobada en el Consejo de Ministros, celebrado el pasado 24 de junio. La gestión de estas ayudas se tramitará a través de la plataforma SITVE, que gestionará de forma rápida y eficaz el pago de las ayudas para la adquisición de los vehículos eléctricos.
La solicitud de la ayuda se gestiona a través de los agentes de ventas que voluntariamente decidan adherirse al plan de ayudas. Estos agentes realizan las actividades que se determinen en el convenio que cada uno de ellos suscriba con la Fundación FITSA en el que se especificarán las condiciones para el registro de las solicitudes en la plataforma de gestión SITVE.
El beneficiario final será quien recibirá la cuantía de las ayudas, aunque para ello deberá contar con la colaboración del Agente de Ventas que es quién realizará las gestiones oportunas para la petición de la subvención.
El presupuesto total destinado a las ayudas para este ejercicio es de 72 millones de euros.
Las subvenciones pueden alcanzar un 25% del precio de venta, antes de impuestos, con un máximo de 6.000 euros por turismo, furgoneta pequeña, motocicleta y cuadriciclo enchufable a la red eléctrica. La cuantía máxima de la subvención varía en función de la autonomía eléctrica del vehículo.
También se subvencionará el 25% del precio de adquisición bruto de otros vehículos eléctricos como autobuses, autocares o furgonetas grandes con un máximo de 15.000 o 30.000 euros.
Los principales objetivos de estas ayudas son impulsar la presencia en el parque de automoción de vehículos que utilicen la energía eléctrica de la red para desplazarse, así como fomentar la industrialización y comercialización de vehículos eléctricos.