La actividad cultural de la Universidad de Almería tiene como próximos protagonistas la lectura y la fotografía con la presencia de dos destacadas figuras en cada uno de estos ámbitos: Carlos Fonseca y Chema Conesa, respectivamente.
La primera de las citas será mañana miércoles a las 17.00 horas con el Club de lectura que se celebrará en formato on-line con el escritor Carlos Fonseca, quien hablará de su obra ‘Austral’. Se trata de un encuentro gratuito que ofrecerá la oportunidad de charlar con este autor costarricense-puertorriqueño, considerado uno de los mejores jóvenes narradores de habla hispana.
Sus obras ‘Coronel Lágrimas’, ‘Museo animal’ y ‘Austral’ han sido publicadas por la editorial Anagrama y traducidas al inglés, alemán, francés, italiano, griego, turco y croata. Fonseca es profesor en el Trinity College en la Universidad de Cambridge.
‘Austral’ es una fascinante indagación en el dolor de la pérdida, la desaparición de lenguas y recuerdos, la necesidad de la memoria y la escritura, los peligros de la globalización y los lugares recónditos de Latinoamérica que sobreviven a ella. De todo ello hablará en este encuentro literario con sus lectores.
El jueves, 9 de febrero, el turno será de Chema Conesa en el marco de la actividad ‘Encuentro con la imagen: fotografía’ que se celebrará a las 18.00 horas, también en formato on-line. Esta actividad tiene plazas limitadas con aforo de 45 personas, pero quienes se queden fuera podrán seguir la charla a través del canal de Youtube de Cultura de la UAL, sin la opción de poder interactuar con el fotógrafo.
Con una amplia y premiada trayectoria profesional en medios como El País, El Mundo o Yo Dona, Conesa es fotógrafo, periodista y editor gráfico de periódicos. Actualmente continúa su labor fotográfica y editorial con la dirección de la colección Photobolsillo (monografías de fotógrafos españoles editada por La Fábrica), así como con el comisariado de exposiciones y ediciones de otros libros.
A lo largo de su trayectoria profesional ha impartido innumerables seminarios y conferencias y ha participado siendo jurado de cantidad de premios, entre ellos, el Nacional de Fotografía y el Word Press Photo. En este encuentro pretende “comunicar la importancia de lenguaje fotográfico y el uso que hacemos del mismo. Desde la imaginación previa hasta la plasmación en la imprenta, las imágenes hacen un recorrido que comienza en el emisor -el fotógrafo- empeñando su forma de ser implícitamente en la construcción de su fotografía. El recorrido de interpretaciones profesionales que determinarán su uso y, por último, la interpretación y lectura que hará el espectador de esa misma fotografía”.
Sobre los requisitos que debe tener una buena fotografía, destaca el “impacto visual, la veracidad formal y la honestidad profesional. Es un compromiso implícito en el oficio de comunicar”. Conesa reconoce que la fotografía “nunca cuenta más que las palabras, pero sí puede evocar, sugerir e influir en la interpretación del hecho. Al ser fácilmente percibida por el cerebro, si tiene impacto visual, puede alargar la percepción emotiva y construir memoria”.
El fotoperiodismo es un eslabón más en el oficio de la comunicación. “Tiene una importancia vital en el oficio de testimoniar, y es imprescindible en los tiempos que vivimos. Practicado con profesionalidad y compromiso ético, acaba por resultar la certificación de lo veraz. Nunca será una verdad absoluta, siempre habrá otras formas de interpretar las imágenes, por eso el fotoperiodista debe estar sujeto a un compromiso con su oficio”.
En el año 2010 Chema Consea recibió el premio Bartolomé Ros a la trayectoria profesional, en 2012 obtuvo el premio de fotografía de la Comunidad de Madrid y en 2021 la Medalla al Mérito de Bellas Artes. “Actualmente la fotografía que se hace en nuestro país apenas traspasa las fronteras. Tenemos un auténtico déficit de presencia exterior, pese a que en los últimos años, en el territorio prensa, fotógrafos españoles han protagonizado importantísimos premios de periodismo, eso sí, trabajando para medios internacionales que pueden pagar los encargos. Nuestra industria periodística es gruesa en papel couché, y débil en el papel prensa, económicamente hablando”.