Las comarcas olvidadas de Almería y Granada

Problemas similares requieren soluciones comunes. Ésa es la conclusión a la que han llegado los ayuntamientos de las comarcas del Altiplano granadino, el Almanzora y Los Vélez, auténticas «hermanas en desgracia», que ven cómo las oportunidades para sus jóvenes escasean, lo que repercute en un proceso de despoblación que se agrava año tras año. Se han agrupado en Alvelal para unir sus esfuerzos en esta causa común.

Logotipo de la Asociación Alvelal

A causa de estos problemas comunes, en el extremo oriental de Andalucía se ha gestado un término para agrupar a esas comarcas del norte de la provincia de Almería y del noreste de la de Granada: Alvelal, como acrónimo de las citadas comarcas. Se trata, sin lugar a dudas, de un espacio que ejerció como frontera del Emirato Nazarí de Granada y que, tras ser conquistado por la Corona de Castilla, disfrutó de una boyante economía basada en el ganado lanero.

Comarcas que componen el territorio Alvelal y las oportunidades económicas de cada una de ellas

Precisamente ésa una de las ideas que quiere transmitir el libro ‘Territorio e historia en el antiguo oriente granadino’: esas comarcas, a pesar de estar en una situación complicada en el presente, pueden mejorar sus condiciones económicas porque, de hecho, en el pasado ya lo hicieron. Esta monografía se integra en la colección de Historia de la Editorial de la Universidad de Almería, contando como editores con Julián Pablo Díaz López, doctor en Historia Moderna, y Andrés Sánchez Picón, catedrático de Historia Económica de la UAL.

El libro cuenta con una serie de capítulos, redactados por diferentes investigadores, en los que se constata que este periodo de expansión económica, bien estudiado en Huéscar por Francisco Andújar, catedrático de Historia Moderna en la UAL, entra en crisis en el siglo XVIII. Esto supone «el inicio del declive de este territorio», indica Sánchez Picón, quien también analiza los debates en torno a la capitalidad de la provincia que se formó a comienzos del siglo XIX en el tercio oriental del Reino de Granada, «después de un intenso y agrio debate que enfrentó como posibles capitales de esa provincia a Baza y Almería», asegura el investigador. Esa hipotética capitalidad bastetana es inequívocamente una de las oportunidades perdidas de estas comarcas.

Una de las grandes problemáticas del territorio Alvelal es su incomunicación. Entre 1850 y 1950 existieron distintos proyectos para conectar ferroviariamente estas comarcas con las grandes capitales de provincia, como ha estudiado Domingo Cuéllar, aunque sólo se materializó la línea Guadix-Almendricos, que permitía comunicar Granada con Murcia. Esta línea, sin embargo, fue clausurada en 1985, convirtiéndose en otro palo en las ruedas del futuro de estas comarcas. Nos encontramos, por tanto, ante un amplio territorio de más de 2.000 km² sin tren.

Junto al estudio territorial que en el libro hace Rodolfo Caparrós, en declaraciones a Novapolis Sánchez Picón indica una serie de líneas para el futuro. «Los historiadores podemos facilitar una visión de largo plazo, que muestra que ese territorio ha tenido etapas de expansión e integración con mercados internacionales, y eso es un mensaje esperanzador», asegura.

En primer lugar, resulta fundamental contar con unas buenas infraestructuras de transporte, como mínimo, por carretera, que permita una buena conexión con ciudades como Granada y Almería. Aunque desde la perspectiva urbana sea una meta ya superada, contar con una buena conexión a internet es otra asignatura pendiente de muchos pequeños municipios de estas comarcas.

Senderismo en la Sierra de Baza, uno de los pilares del turismo rural

A continuación, es competencia de las administraciones públicas ofrecer unos servicios básicos en sanidad y educación, sin los cuales se estaría penalizando la crianza de sus hijos allí. «Si empiezan a cerrar estos servicios, se inicia una dinámica de despoblación que es imparable», augura este catedrático en Historia Económica de la Universidad de Almería.

En tercer y último lugar, la iniciativa privada cuenta con nichos de mercado en la agricultura ecológica, especialmente en especies como el almendro, y en el turismo rural. Incluso en los últimos años se han instalado varias residencias de ancianos en estos ámbitos rurales, por la buena calidad de vida que ofrecen.

El almendro ecológico es una oportunidad de futuro en el territorio Alvelal

Pero reitera Sánchez Picón, estas oportunidades económicas «tienen que estar acompañadas de la actuación pública, que no permita el desmantelamiento de los equipamientos públicos», porque si no estaríamos «condenando estas comarcas a la despoblación a medio y largo plazo».

En definitiva, estas comarcas se enfrentan a «un gran salto de densidad de población entre el litoral y el interior, mayor que en ninguna época de la historia». El futuro nos dirá si, al igual que ya hizo en el pasado, el territorio Alvelal consigue reinventarse. Como ocurre en tantas otras ocasiones, hay que elegir entre renovarse o morir.