Esta mañana se ha clausurado la XVI edición de los Cursos de Verano de la Universidad de Málaga, organizada por su Fundación con el patrocinio principal de Santander Universidades. Un total de 20 cursos se han celebrado desde el 4 de julio pasando por Ronda, Archidona, Marbella, Vélez-Málaga, Benalmádena y la capital. En total, cerca de 800 asistentes han participado en esta oferta que ha contado con la colaboración de una treintena de empresas, fundaciones e instituciones.
En el acto de clausura han participado Juan Antonio García Galindo, vicerrector de Política Institucional de la UMA; Gemma del Corral, concejala de Cultura y Educación del Ayuntamiento de Málaga; Diego Vera, director General de la FGUMA, y Aurora Mª Martínez, responsable de Instituciones de Almería, Málaga y Melilla del Banco Santander.
El vicerrector ha manifestado que un año más la Universidad ha salido a la calle y se ha elevado la calidad de estos cursos. La concejala ha destacado que este foro de debate y conocimiento “tan enriquecedor” es el complemento perfecto para la oferta cultural malagueña. Vera ha agradecido la colaboración de todos los que han hecho posible esta nueva edición y ha hecho hincapié en que el éxito es de todos, de los seis ayuntamientos, los 300 ponentes aproximadamente, los alumnos y los patrocinadores.
El libro electrónico contra el de papel
El escritor Antonio Soler ha llevado la batuta del curso que ha profundizado sobre los entresijos del mundo editorial en la actualidad: “Hemos tenido la suerte de contar con protagonistas de primera línea, editores, autores, periodistas culturales y agentes literarios”, ha explicado Soler haciendo un balance muy positivo del transcurso de este seminario. Junto a estos protagonistas, con la colaboración de la Fundación Málaga y la Fundación José Manuel Lara, se ha analizado el binomio negocio y manifestación cultural, que, según el director, no siempre van de la mano y que ha señalado como una característica especial de esta industria el hecho de que un editor puede tener un libro en el que confía y como cree que su deber es sacarlo a la luz lo publica aunque tenga el convencimiento de que no tendrá beneficios económicos. “Es un mundo bastante opaco”, ha añadido Soler.
Sobre la crisis económica ha explicado que ha conmocionado a toda la sociedad y que lo primero que cae es la cultura, “lo que es un error porque está asociada a la formación que es una inversión a medio y largo plazo”, ha incidido el también articulista. Además, cree que se ha notado doblemente porque en el sector de la literatura se venía de “una especie de burbuja” con anticipos económicos grandes para los escritores y ahora todo esto se ha reajustado. A este respecto ha manifestado que hay lectores fieles que siguen consumiendo lo mismo y que el que ha huido es el lector ocasional, pero asegura que los índices de venta de las ferias del libro de Madrid y Barcelona en 2016 y 2017 indican que hay una recuperación clara.
En cuanto a la repercusión de la revolución tecnológica en el sector, Soler ha recordado que a finales del siglo XX se anunciaba un cambio radical en el que el papel iba a desaparecer: “En el año 2000 profesionales del mundo de la edición auguraron que en 2010 el 80 por ciento se leería en libro digital y el 20 en papel, estamos en 2017 y el porcentaje del digital nunca ha llegado al 10 por ciento”. “Se ha comprobado que este dato se ha estancado y que el libro de papel se consolida como un gran invento de la humanidad”, ha destacado. Por el contrario sí considera que la piratería es una amenaza grande y que es un problema español porque no se persigue realmente “como un delito que es lo que es”.
Bulos sobre alimentos y cáncer
Con la fiesta final del segundo showcooking de Dani García ha finalizado el curso “Gastronomía y salud”, dirigido por Emilio Alba y Manuel Tornay, donde a lo largo de la semana se ha analizado el impacto que tiene la nutrición en nuestro organismo y se ha elogiado los beneficios de la dieta mediterránea.
Una de las ponencias corrió a cargo del propio Alba, catedrático de Oncología de la Universidad de Málaga, que centró su exposición en la relación entre la dieta y el cáncer, haciendo hincapié en los mitos que rodean a ciertos alimentos en cuanto a la prevención de esta enfermedad, de la que se registran siete mil nuevos casos en la provincia cada año según las cifras que aportó el especialista. El oncólogo ha advertido de los bulos que circulan principalmente por Internet que otorgan propiedades curativas a algunos productos, recomendando hacer caso omiso a estos consejos, que, como ha explicado, a veces esconden intenciones comerciales. “No hay ningún alimento que por sí sin contaminar sea cancerígeno y tampoco hay ningún tratamiento dietético del cáncer desde el punto de vista curativo”, ha sentenciado. En este sentido, Alba ha apuntado que lo que sí existen son patrones de alimentación y estilos de vida con los que la probabilidad de tener cáncer es menor y hábitos alimenticios que ayudan a evitar una recaída una vez se haya superado la enfermedad, unas pautas de nutrición vinculadas a un mayor consumo de frutas, verduras y legumbres sin abusar de las carnes rojas.
Por último, el oncólogo se ha congratulado por el alto nivel de los ponentes participantes y la buena asistencia que ha registrado el curso que codirige, un seminario que ha definido como “positivo y divertido” gracias a la incorporación de actividades lúdicas dentro del programa formativo. Para Alba, ésta es la esencia de los Cursos de Verano, una actividad académica que conjugue charlas instructivas con un componente lúdico que sirva para aprender y también el deleite.
Actividad portuaria en el Estrecho de Gibraltar
La conferencia de clausura del seminario que se ha desarrollado en el Instituto de Estudios Portuarios ha estado protagonizada por Álvaro Rodríguez, director técnico de Puertos del Estado del Ministerio de Fomento, que ha explicado las oportunidades que se le presentan al puerto de Málaga en un futuro reciente tanto en segmento de las mercancías como en el de los pasajeros.
En el caso del transporte mercantil, el experto considera que el Puerto de Málaga todavía tiene muchas opciones para mantener conectividad con otros continentes, tanto en materia de graneles como en mercancía general contenerizada. En un ámbito más cercano con el estrecho de Gibraltar y el norte de África, Rodríguez cree que se abre un abanico de posibilidades muy importante porque, según el director técnico, está emergiendo un desarrollo industrial en Marruecos que va a generar mucho flujo y la conectividad marítima va a ser fundamental, por lo que será una ocasión para los servicios que puede ofrecer el Puerto de Málaga.
De hecho, el ponente ha señalado que estas líneas de trabajo ya se están incorporando en la planificación del puerto y opina que según los planes estratégicos diseñados al respecto éstas se materializarán a corto plazo. Además, Rodríguez ha aportado que aunque el peso del puerto de Málaga en cuanto a mercancías no es muy alto dentro del mapa portuario español, su importancia sí es más reseñable medido en pasajeros gracias a las líneas regulares y el sector crucerístico, una de las características diferenciadoras del Puerto de Málaga para el experto. En esta línea, ha señalado que este potencial en cuanto a buques cruceros está acompañado de una eclosión de la oferta turística de la ciudad, y ha abogado por una operación que integre la actividad portuaria dentro de la cotidianidad de la capital para facilitar un desarrollo en paralelo. “El puerto, aunque se conciba en las ciudades como algo molesto, es un motor de desarrollo económico. La ciudadanía tiene que entender que hay que convivir con el puerto y contribuir a un crecimiento armónico y sostenible”, ha finalizado.
Cursos de Verano de la UMA en Benalmádena
Al acto de clausura han asistido Victoriano Navas, alcalde de Benalmádena; José Francisco Murillo, vicerrector de Estudiantes de la Universidad de Málaga; Antonio María Lara, director académico del Área de Investigación, Empleo y Empresa de la FGUMA; Ana Scherman, concejala de Juventud, Festejos y Residentes Extranjeros del Ayuntamiento, y Laura Macías, directora de oficina del Banco Santander en la localidad. Lara ha destacado el apoyo e implicación, tanto del alcalde como de la concejala, por alojar los cursos de Verano un año más, y el esfuerzo de los directores y secretarios por aportar contenidos novedosos y actuales, que ha calificado de “excelentes”. También ha remarcado el “indispensable” patrocinio de Banco Santander junto a la colaboración de la Fundación Cudeca y diversos proyectos de investigación que han formado parte del programa de los seminarios.
Por su parte, Murillo ha manifestado su honor por clausurar una nueva edición y ha felicitado al alumnado por haber elegido la formación estival, que considera una herramienta básica para la universidad en su misión de “acercar la cultura crítica a la ciudadanía para la mejor comprensión del mundo y para actuar con la mejor libertad posible”. Por último, el alcalde ha mostrado su orgullo y satisfacción por complementar la oferta educativa de la UMA y porque Benalmádena haya mantenido el carácter innovador y alternativo de los cursos celebrados en 2016.
Director del Museo Thyssen-Bornemisza
El curso “La vida al final de la vida: ciencia, pensamiento, solidaridad y arte ante la muerte” dedicó la tarde de ayer a la historia del arte de mano de Guillermo Solana, actual director artístico del Museo Thyssen-Bornemisza. “Artistas de todas las épocas, todos los países y todas las culturas han hablado de la muerte de una manera u otra”, ha explicado sobre el contenido de su conferencia. Sin embargo, Solana ha resaltado el escaso interés y el “reparo” que provoca por parte de los visitantes de museos hacia colecciones o exposiciones que muestren “enfermedad, violencia, envejecimiento y la muerte misma”. “No busca con gusto este tipo de temas, prefiere sólo arte que le alegre a uno la vida, como Matisse o Impresionismo”, ha declarado, aunque ha matizado que la recepción aumenta cuando la muerte es retratada por autores reconocidos como Bacon o Caravaggio.
La ponencia del también profesor de Estética y Teoría de las Artes en la Universidad Autónoma de Madrid se ha centrado en las obras más conocidas que han representado la muerte a lo largo de la historia del arte. El recorrido descrito comienza desde la época grecorromana hasta la Edad Media cristiana del siglo XV, cuando triunfa lo que se denomina “La danza macabra”, como cuenta Solana, “llena de esqueletos y calaveras que se adueñan del mundo”. Como punto de ruptura, también ha tratado la aparición de destacadas artistas, desde Frida Khalo hasta Marina Abrahamovic, encargadas de transfigurar los estereotipos de la imagen de la muerte, que, según el profesor, poseen una fuerte “carga patriarcal” y que siempre se ha mostrado “particularmente agresiva y violenta hacia las mujeres”.
En cuanto al panorama actual en Málaga, Solana ha celebrado y valorado positivamente la apertura de nuevos museos de arte en la capital en los últimos años, que cuenta a día de hoy con casi una decena de ellos, y ha resaltado la importancia del papel de las instituciones locales y regionales para hacerlo realidad. Sin embargo, desde su punto de vista como director artístico, le gustaría que las noticias que le llegan de este brote de museos y de importación de obras desde otras instituciones internacionales, estuviesen más acompañadas del trabajo de creadores locales, regionales e incluso de la propia universidad.
El empoderamiento de la mujer en el cine
La última conferencia del curso “Las mujeres ‘diferentes’: santas, brujas o visionarias en la literatura y el cine” ha corrido a cargo de María del Mar Mañas, profesora de la Universidad Complutense de Madrid, que también ha formado parte en la mesa redonda “El cine y la mujer ‘diferente’”. Para su ponencia ha partido del análisis de dos películas de factura nacional: “Extramuros” (1985) y “Entre tinieblas” (1983), dirigidas respectivamente por Miguel Picazo y Pedro Almodóvar. Esta aportación completa el recorrido histórico sobre las llamadas “mujeres visionarias”, tratado a lo largo del seminario y que destaca el ámbito religioso como el más proclive para acceder a la esfera pública. La profesora ha resaltado que estas producciones, aunque retraten a sus protagonistas desde dos puntos de vista muy dispares, poseen una similitud: la idea de “empoderamiento” de la mujer. “Son películas en las que el papel de la mujer en la sociedad es fundamental, aunque ambas sitúan la narración dentro de los conventos, un mundo en el que podía desarrollar el poder”, ha matizado.
Ponencia de María del Mar Mañas.Ante este análisis, Mañas ha expresado su preocupación por los resultados de una investigación reciente que mostraba que el cine español más visto entre adolescentes muestra roles masculinos y femeninos que responden a estereotipos ya superados por la sociedad, como por ejemplo, el del “amor romántico”. “Estas ideas que puedan fomentar violencia de género, con la del control tipo ‘porque te quiero’, son temibles y piensas: ¿se ha luchado tanto en el feminismo para conseguir esto?”, ha enfatizado. Sobre la presencia de más directoras en el panorama cinematográfico, ha afirmado que existe una lista bastante nutrida, pero que cuentan con una menor visibilidad y acceso a medios. Mañas ha lamentado la concepción del “cine dirigido por mujeres” como si se tratara de un género en sí, como si estuviesen “confinadas a un gueto”, y ha recalcado que una mayor concurrencia de directoras afectaría de forma positiva, no solo a la imagen de la mujer, sino a su total “normalización para evitar hacer distinciones”.