La Universidad de Murcia ha celebrado este jueves una conferencia enmarcada dentro del proyecto 17 ODSesiones sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU. Ha sido un encuentro para abordar tres modelos diferentes para combatir la pobreza en la Región bajo el título ‘Empresas y pobreza: pobreza energética, responsabilidad social y contratación pública responsable’.
En la conferencia han participado Pilar Megía Rico, directora de Responsabilidad Social Corporativa de Aguas de Murcia; José Manuel García Marrero, presidente de ADEIRMUR, Asociación de Empresas de Inserción Laboral de la Región de Murcia; y Diego Cruzado, presidente de EAPN RM, la Red de Lucha contra la Pobreza y la Exclusión Social en la Región de Murcia. Moderando la conferencia ha estado Longinos Marín Rives, delegado del rector de la UMU para la RSC y la Transparencia.
La primera de las intervenciones ha venido de la mano de Pilar Megía, en representación de Aguas de Murcia, que ha explicado en qué medidas se concreta el compromiso de la compañía con los problemas sociales. “Nadie que no pueda pagar el agua en Murcia, se quedará sin agua”, ha asegurado tajantemente. Durante su intervención ha comentado los inicios del Fondo Social de la empresa, que datan del año 2012, dotado con 200.000 euros. En aquella época este montante estaba destinado a la condonación de deudas de personas pertenecientes a colectivos en riesgo de exclusión.
Tal y como ha explicado la responsable de RSC de Aguas de Murcia, los inicios de este programa no fueron fáciles. En 2015 se delegó su gestión en los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Murcia, lo que permitió una mejor distribución de las mismas. En 2017 presentaron un estudio sobre estas políticas, en el que participó la UMU, y fruto de este estudio se sustituyó el Fondo Social de condonación de deuda por una “tarifa plana de 5 euros al mes para aquellas familias que acrediten una situación de precariedad económica”. Desde 2012 hasta la fecha, Aguas de Murcia ha destinado 5,7 millones de euros a su Fondo Social.
Por su parte, Juan Manuel García (ADEIRMUR) ha explicado a los presentes qué se entiende por empresas de inserción. Son aquellas que, a través de su actividad mercantil, realizan actuaciones sociales y de inserción laboral, y que en la actualidad deben de estar inscritas en un registro gestionado por la Consejería de Empleo, Universidades, Empresa y Medio Ambiente. En este sentido, el ponente ha manifestado que son empresas que “deben competir en el mercado, como cualquier otra”. Además, añadió que para que realicen de forma efectiva su función “deben generar puestos de trabajo que sean de tránsito; en tres años las personas se deben incorporar al mercado de trabajo regular”.
Para finalizar, Diego Cruzado, de EAPN Murcia, ha indicado que “la mejor forma para reducir la pobreza es generar riqueza y redistribuirla”. Ha puesto de manifiesto que, tras los peores años de la crisis, “la situación ha mejorado, pero aún queda mucho camino que recorrer”. Según ha explicado, el 34,7% de la población de la Región se encuentra en riesgo de pobreza o exclusión social. Cruzado ha concluido que prueba de ello es que “tener trabajo no es condición suficiente para evitar este riesgo debido a la precarización del mismo”.
La conferencia se enmarca dentro del proyecto 17 ODSesiones de la Universidad que fue inaugurado oficialmente el pasado 31 de enero. Durante el mes de febrero se realizan actividades enfocadas en el ODS1: Fin de la pobreza, siendo las sedes las Facultades de Economía y Empresa y Trabajo Social.