La Universidad de Almería pone a pleno rendimiento las impresoras 3D de las que dispone y ayuda a coordinar a un grupo de más de 70 voluntarios para hacer en tiempo récord más de 700 máscaras de protección contra el COVID-19, ya en uso de los sanitarios.
El fin de semana ha dado para mucho, sabiendo que no hay descanso ante el virus. La UAL continúa apoyando con firmeza la lucha emprendida por la sociedad, en la que en primera línea se encuentra todo el personal sanitario, y es por ello que, tras el envío de todo el material de protección que todavía no se había utilizado, a esta altura de curso académico, en la Facultad de Ciencias de la Salud, se ha puesto manos a la obra en la fabricación de más. Agotado el ya existente, ha establecido un sistema para la fabricación 3D de otros equipos de protección, y los resultados están siendo satisfactorios. Más en concreto, desde el pasado viernes un grupo de ‘makers’ está trabajando intensamente en Almería en la impresión 3D de pantallas de protección facial frente a COVID-19, dirigiendo esta operación la Universidad de Almería. Como resultado del esfuerzo, en la mañana de este lunes ya se han entregado a los hospitales de Torrecárdenas y de Poniente un total de 732 viseras.
A las labores emprendidas por la institución universitaria se ha sumado un grupo de voluntarios, aportando cada uno de ellos sus impresoras particulares, y actualmente hay 72 personas que se dividen el trabajo, coordinadas por la UAL. Las peticiones, hasta el momento, han sido de 1.728 unidades, fundamentalmente de hospitales y residencias de mayores, por lo que en tiempo récord se ha logrado satisfacerlas en más de un 42%, sin tener presente en ningún momento que era fin de semana. Este elemento clave de los EPI ya está a disposición de los sanitarios, mientras que se continúa la fabricación de más para ayudar a cubrir todas las necesidades.
En ese sentido, se ha detallado desde el equipo de trabajo le apoyo en fabricación de equipos de protección individual: “Hemos puesto a disposición y pleno rendimiento 10 impresoras, también facilitamos el material fungible necesario, como son acetatos, filamentos de impresión o gomas, para apoyar a los voluntarios”. Además, “se está colaborando en toda la organización y logística necesaria”. Cabe recordar que la Universidad de Almería puso a disposición de las autoridades sanitarias todos sus equipos PCR para la detección de COVID-19, además de que en la anterior entrega se enviaron dos respiradores de nueva generación con procedencia, igualmente, situada en la Facultad de Ciencias de la Salud. Sin más existencias, la única salida ha sido la fabricación, y se ha optado por este tipo de elemento básico dentro de los equipos de protección individual tan demandados por la comunidad sanitaria y demás cuidadores de enfermos de coronavirus. En sendos hospitales de Torrecárdenas y Poniente se han recibido con emoción y gratitud, pero ya se sabe que no hay tiempo que perder y se continúa la producción.