El efecto contaminante se ha incrementado en los centros urbanos y los accesos, según un estudio de la Universidad Europea de Tecnología realizado por investigadores de las politécnicas de Cartagena y Chipre.
Primeros frutos de la coloración científica en el marco de la Universidad Europea de Tecnología. Un estudio recién publicado en la revista Land muestra el impacto del Covid-19 en la movilidad urbana y sus derivadas medioambientales en la contaminación de las ciudades, fruto de la colaboración entre los investigadores Salvador García-Ayllón de la Universidad Politécnica de Cartagena y Phaedon Kyriakidis de la Cyprus University of Technology.
La investigación realiza un análisis espacial geoestadístico de la relación entre la variación de los patrones del comportamiento de la movilidad urbana y la evolución de los niveles de contaminación en diferentes lugares de las ciudades en los años 2019, 2020 y 2021. “En muchas ciudades europeas los centros urbanos y las zonas de acceso tradicionalmente más saturadas por el tráfico han incrementado sus niveles de contaminación, pese a que inicialmente se redujeron por la pandemia”, explica Salvador García-Ayllón.
Más vehículo particular y menos transporte público
“Se ha reforzado el hábito de utilizar el coche particular”, remarca el investigador de la Escuela de Caminos y Minas de la UPCT. Este fenómeno no se está viendo compensado por el fuerte incremento del uso de patinetes eléctricos, tal y como se puede comprobar con los índices de contaminación en las ciudades. “La dinámica es similar es todas ellas”, añade García-Ayllón, responsable del grupo de investigación de Política Territorial, Planificación Ambiental y de las Infraestructuras.
El investigador, responsable de la elaboración del Plan de Movilidad Urbana de Cartagena y director de la cátedra Biyectiva-UPCT sobre análisis espacial e inteligencia artificial, está utilizando sistemas de ‘deep learning’ para parametrizar el comportamiento de los ciudadanos y simular su posible evolución. “La tendencia iniciática es hacia medios de transporte más contaminantes”, explicó en una reciente conferencia de la Universidad Europea de Tecnología.
“El cambio de hábitos en movilidad por la pandemia hace más necesaria la implementación de zonas de bajas emisiones, lo que será obligatorio por ley en todas las ciudades de más de 50.000 habitantes a partir de 2023”, concluye García-Ayllón.
La colaboración entre los investigadores que han publicado este artículo se ha desarrollado gracias a la ayuda del programa Erasmus+ KA-103, que facilita la movilidad del profesorado entre instituciones de la Universidad Europea de la Tecnología, formada por ocho politécnicas de otros tantos países de la UE. Este trabajo pretende ser el germen de la creación en un futuro de un instituto científico de análisis espacial y uso de herramientas SIG liderado por la UPCT, una herramienta prevista en el marco de desarrollo de la EUT+.