El papel de las mujeres en la ciencia es un debate recurrente. Su participación en los distintos ámbitos ha aumentado mucho en los últimos años, pero todavía no ha llegado a una igualdad que permita aprovechar todo el talento del que dispone la sociedad, en un momento en el que es más necesario que nunca por el peso que están cobrando la innovación y la tecnología.
Es una realidad a la que se le pueden poner cifras. Por ejemplo, en su último informe, el CSIC ha constatado que el porcentaje de mujeres investigadoras en la plantilla de este organismo de referencia en el mundo de la ciencia es del 36,2 %. Esta proporción, de poco más de un tercio, es una constante: la participación de mujeres como inventoras de patentes de prioridad en 2020 está en torno al 38 %, el número de proyectos nacionales vinculados al CSIC liderados por mujeres es del 36 %, y en el ámbito europeo, del 33,4 %.
Esta situación es muy similar a la que tiene lugar en el sector privado, en las empresas vinculadas a la ciencia, que en muchos casos lo son a través de la tecnología. Y es que este último sector, el tecnológico, sufre aún más la falta de mujeres por varios factores que comienzan desde la educación: las mujeres ya están muy presentes en campos más ligados a la investigación, como la biología o la medicina, pero en aulas de las carreras más tecnológicas las jóvenes todavía tienen un peso menor.
Por otra parte, tal y como se puede deducir de las cifras que hablan de los proyectos encabezados por mujeres, esta desigualdad se hace patente en la escala directiva. En la ciencia, al igual que en muchos otros campos, los lugares de toma de decisiones notan la ausencia femenina, que comienza en los escalafones iniciales pero se refleja y se agrava en la llegada a los niveles más altos. Es el llamado “techo de cristal”, que se da tanto en el sector público como en el privado.
Frente a esta realidad, la Escuela de Organización Industrial (EOI) apuesta por la formación en liderazgo para apuntalar el papel de las mujeres en los espacios directivos, con una amplia formación que es aplicable tanto en la ciencia como en otros muchos ámbitos, a través del programa ‘Talentia 360. Mujeres Directivas’ que desarrolla con el Instituto de las Mujeres desde 2008 y el Programa Ejecutivo en Desarrollo Directivo para Mujeres con Alto Potencial que ofrecen las empresas a sus empleadas para facilitar su promoción profesional.
Este compromiso de EOI con la igualdad y el liderazgo femenino consta además del Programa Mujeres 2030, que contempla hasta 60 ayudas con un 35% de descuento para mujeres que se matriculen en cualquiera de los Masters o Programas Ejecutivos de EOI durante el curso 2021/2022. Se trata de una medida específica para facilitar el desarrollo del talento de las mujeres y la mejora de sus carreras profesionales.
Además, EOI es referente, dentro de las escuelas de negocio, en digitalización y sostenibilidad, dos asuntos que se sitúan también entre los grandes retos que enfrenta la ciencia. Desde el compromiso con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y la Agenda 2030, EOI cree en las posibilidades de unir ambas cuestiones, mediante una enseñanza del potencial de las tecnologías y su aplicación a la lucha por la sostenibilidad y la economía verde.
