El Huerto Ecológico Socioeducativo de la Universidad de Almería ya es una realidad. Este espacio nace con una finalidad terapéutica, para personas con daño cerebral y con diversidad funcional. Además se convertirá en un espacio para fomentar la cultura y la educación ecológica para niños de Preescolar.
Sin duda, el Huerto Ecológico de la UAL es un proyecto singular en el panorama universitario de este país, donde si bien había experiencias de huertos puestos a disposición de la sociedad, nunca antes habían estado dirigidos a la recuperación de personas enfermas y a la educación de los niños.
El rector de la Universidad de Almería, Carmelo Rodríguez, ha destacado los fines educativos, terapéuticos, científicos y culturales de este espacio. Ha asegurado que “está pensado para impartir docencia a estudiantes de la Universidad de Almería de Enseñanzas Oficiales y Propias y abierto a la Comunidad Educativa, también para el uso de personas con necesidades específicas y diversidad funcional, y en el ámbito científico, se centrará en el estudio y desarrollo de nuevas estrategias de agroecología, para lo que estará abierto a grupos y centros de investigación especializados”.
Huerto ecológico de la UAL: educación y terapia
El huerto terapéutico permitirá la programación de actividades de rehabilitación en un espacio natural. Actualmente, los movimientos terapéuticos se han movido hacia planteamientos en los que las actividades de intervención tienen un sentido funcional, se ha demostrado que siguiendo estos principios mejora la adherencia, motivación y generalización de los aprendizajes y se consiguen avances en la rehabilitación a una mayor velocidad y se mantienen en el tiempo. Por su parte, el huerto escolar estará destinado a la enseñanza de las prácticas agrícolas y las cuestiones medioambientales entre niños. Sin olvidar el uso por parte de estudiantes de la Universidad de Almería y de grupos de investigación o centros especialmente interesados en el trabajo en huertos ecológicos.
En un futuro la UAL está abierta a colaborar activamente con la Red de Ecoescuelas y Ecocampus, además de otras experiencias de huertos sociales que cada vez son más numerosos en Almería. Está demostrado que éstos tienen múltiples beneficios: mejoran la calidad de vida, las relaciones intergeneracionales, la alimentación saludable y la salud física y psicológica. Además, desde el punto de vista educativo, económico y del empleo, mejoran la renta familiar de numerosas familias, propiciando el ahorro y el consumo de productos locales. Por último y citando sólo algunos de los múltiples beneficios, favorecen la creación de espacios verdes y difunden la agricultura ecológica y de tipo urbanístico, regenerando espacios baldíos y poniendo en valor solares en desuso y suelos abandonados de la actividad agrícola.