El periodista y fotógrafo Gervasio Sánchez, Premio Nacional de fotografía, inaugura su exposición “Sarajevo, guerra y paz” el próximo miércoles 27 de octubre a las 12 horas, en la Sala El Cub del Museo de la Universidad de Alicante. Sánchez, impartirá además una conferencia el mismo miércoles 27 a las 19 horas, con el mismo título de la exposición, y acompañará al público en tres visitas guiadas: el miércoles 27, a las 18 h, y el jueves 28 a las 12 h y a las 18 horas. La muestra permanecerá abierta al público hasta el 9 de enero de 2022.
“Sarajevo, guerra y paz” presenta un recorrido expositivo conformado por cincuenta fotografías realizadas por Gervasio Sánchez, 25 en blanco y negro realizadas durante la guerra de Bosnia-Herzegovina, que se enfrentan a otras 25 imágenes en color de la actualidad, fruto de una labor de búsqueda del autor, durante tres meses, en los mismos lugares.
Esta experiencia, según palabras de Gervasio Sánchez, es “parte incuestionable de mi vida profesional y personal. Es raro el día que mi memoria no se detenga en aquel conflicto. Sigo soñando con los bombardeos continuos y viendo el miedo en los rostros de sus habitantes a pesar de que en abril de 2017 se cumplirá un cuarto de siglo de su inicio”. Sánchez detalla que “Allí aprendí que la guerra no se puede contar. Por mucho que apures el bolígrafo, agudices el ingenio o encuadres la realidad, nunca conseguirás que el lector conciba la verdad de un conflicto armado. El horror es inimaginable para quien no lo ha vivido”.
Más de 100.000 bosnios fueron asesinados o desaparecidos, de los que miles eran menores de edad. Sólo en Sarajevo murieron 1.601 niños. Hay más de 25.000 menores huérfanos de padre o madre en todo el país. Los más optimistas afirman que la capital bosnia no ha perdido su espíritu cosmopolita, mientras que los pesimistas creen que se ha disuelto en el desamparo de la posguerra. Pero casi todos claman contra los europeos: “Nos traicionaron durante la guerra y nos han abandonado después de los acuerdos de paz”, afirman.
El autor explica que “Aunque no soy culpable es difícil de explicar mi convulsión interna. Sé quiénes fueron los principales culpables: los que ordenaron matar y hacer desaparecer a centenares de miles de seres humanos. Pero en esta clasificación también incluyo a los responsables políticos europeos de la época” y añade, “Sé que uno de los vicios principales de nuestro tiempo es obviar el pasado, rehabilitar las biografías de los prohombres y convertir el mundo en un estercolero declarativo. Sé que hemos claudicado ante la verdad y que las víctimas son condenadas al ostracismo. Sé que todavía hay centenares de tumbas sin abrir. Sé qué ocurre cada 11 de julio en el cementerio de Potocari cuando miles de mujeres, hombres y niños se reúnen para enterrar a los últimos identificados de Srebrenica. Sé que los huesos de miles de bosnios sin identificar lloran en bolsas de plástico que se agolpan en frigoríficos gigantescos en Tutzla. Sé porque lo he visto con mis propios ojos demasiadas veces. Sé porque quiero saber. Porque la memoria y la conciencia son lo único que me quedan ante la ignominia y la mentira. Ambas heridas pero vivas”.
La exposición cuenta con el patrocinio de la Consellería de Participación, Transparencia, Cooperación y Calidad Democrática, como patrocinador, la Cátedra Paz y Justicia de la UA, como organizador del evento, y la colaboración de los vicerrectorados de Relaciones Internacionales y Cooperación para el Desarrollo; y Cultura, Deporte y Extensión Universitaria.
Gervasio Sánchez
Nacido en Córdoba en agosto de 1959, Gervasio Sánchez es periodista desde 1984 y vive en Zaragoza desde hace 33 años. Sus trabajos se publican en Heraldo de Aragón, colabora con la Cadena Ser y la BBC y dirige desde el 2001 el Seminario de Fotografía y Periodismo de Albarracín. Es autor de más de una docena de libros fotográficos: El Cerco de Sarajevo (1995) y los publicados por la editorial Blume Vidas Minadas (1997, 2002 y 2007), Kosovo, crónica de la deportación (1999), Niños de la guerra (2000), La Caravana de la muerte. Las víctimas de Pinochet (2002), Latidos del Tiempo (2004), junto al escultor y artista plástico Ricardo Calero, Sierra Leona, guerra y paz (2005), Sarajevo, 1992-2008 (2009), Desaparecidos (2011), Antología (2012), Mujeres de Afganistán (2014) junto a la periodista Mònica Bernabé, Vida (2016). Algunas de sus exposiciones han sido comisariadas por Sandra Balsells y Gerardo Mosquera. También coordinó en 2001 junto a Manuel Leguineche el libro Los ojos de la guerra (Homenaje a Miguel Gil) y en 2004 publicó el libro literario Salvar a los niños soldados.
Recibió los premios de las Asociaciones de Prensa de Aragón, Almería y Córdoba, los premios Cirilo Rodríguez, Derechos Humanos, Ortega y Gasset, Rey de España, Julio Anguita Parrado, Bartolomé Ros, Jaime Brunet, Gernika por la Paz y la Reconciliación, José María Portell, José Antonio Labordeta y en 2009 se le concedió el Premio Nacional de Fotografía. Es enviado especial por la paz de la UNESCO desde 1998. En 2004 el gobierno de Aragón le entregó la Medalla al Mérito Profesional y en 2011 el gobierno de España le concedió la Gran Cruz de la Orden Civil de la Solidaridad Social. Es hijo adoptivo de Zaragoza y miembro de honor de la Asociación de fotógrafos de Córdoba (AFOCO). En el 2015 TVE emitió el galardonado documental sobre Gervasio Sánchez en su ya mítica serie “Imprescindibles”.