El Campus de Cuenca acogió la fase regional de la Olimpiada Matemática de Castilla-La Mancha 2024 en las categorías Alevín, Juvenil y Júnior, en la que se clasificaron un total de nueve estudiantes de primaria y ESO. Organizada por la Sociedad Castellanomanchega de Profesores de Matemáticas, en colaboración con la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), los ganadores representarán a Castilla-La Mancha en las finales nacionales.
Castilla-La Mancha ya conoce a los nueve participantes que representarán a la región en la Olimpiada Matemática Nacional. Los ganadores han disputado la fase regional en el Campus de Cuenca de la UCLM, en una prueba en la que han participado 28 estudiantes (diez por categoría, a excepción del alumnado de último ciclo de primaria) entre 5.º de educación primaria y 4.º de la ESO. La actividad, organizada por la Sociedad Castellanomanchega de Profesores de Matemáticas, ha contado con el apoyo de la Universidad de Castilla-La Mancha tanto en las fases locales de cada provincia como en esta última prueba.
Cuáles son los nueve estudiantes de Castilla-La Mancha clasificados para final nacional de la Olimpiada Matemática
Daniel Moratalla Cortés, Bruno Fernández Torkar (ambos de Toledo) y Pablo López Oliver, de Albacete, representarán a la región en categoría Alevín acompañados por la profesora Aránzazu Fraile en una fase final que se celebrará en Madrid del 26 al 29 de junio. De igual manera lo hará Evangelina Herranz en categoría Júnior con los alumnos Bruno Verdeal Rodríguez (Guadalajara), Miguel Barnés Lorenzo (Albacete) y Jorge Pacheco Díaz (Ciudad Real), en una prueba que se disputará en Jarandilla de la Vera (Cáceres) del 14 al 18 de junio. En cuanto a la categoría Juvenil, Aarón Jiménez Lázaro, de Toledo, Adrián Andújar Sevilla, de Ciudad Real, y Pablo Atienza Molina, de Albacete, viajarán hasta Melilla para participar en la fase final del 23 al 27 de junio con el docente Ángel González.
La Olimpiada Matemática tiene como objetivo estimular el estudio de esta ciencia entre el alumnado de niveles preuniversitarios y la detección de talento temprano. A la relevancia académica se suma la importancia del ocio, pues tras realizar la prueba matemática en la sala Iberia de Cuenca, el estudiantado participante se trasladó a la localidad conquense de Carboneras de Guadazaón. Allí pernoctaron y disfrutaron de juegos de lógica y matemáticas y del acto de premiación.