Enrique Barón defendió el papel de la Universidad para formar en valores

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Momento celebrado ayer en la UJA.

La UJA celebró ayer varios actos dentro de las jornadas ‘Formando en valores universitarios’, una cita enmarcada en los actos del 25 Aniversario de la institución, dentro del programa de Formación Complementaria Transversal del Alumnado de la UJA, FoCo Generación UJA. Destaca entre ellos la presencia del ex presidente del Parlamento Europeo y ex ministro de Transportes, Turismo y Comunicaciones del Gobierno de España, Enrique Barón Crespo, quien defendió que «la Universidad está para formar en valores y creo que es formar a ciudadanos que sean capaces, no sólo de comportarse como buenos ciudadanos, sino de contribuir a su comunidad».

El conferenciante fue presentado por el vicerrector de Grado, Postgrado y Formación Permanente, Juan Manuel Rosas; la vicerrectora de Estudiantes, María Luisa del Moral, y el director de Secretariado de Enseñanzas de Formación Permanente, José Manuel Castro.

Enrique Barón, que impartió la conferencia ‘Reflexión sobre ética y ciudadanía responsable’, es actualmente presidente de la Fundación Yehudi Menuhin, dedicada a la promoción de la educación a través del arte, y con una dilatada trayectoria en la que destaca su responsabilidad como académico, ensayista y novelista.

Enrique Barón manifestó que la Universidad está para formar en valores “y eso presupone la defensa, la preparación y la formación en los valores que definen una sociedad libre, responsable y a unas personas responsables, empezando por el profesorado hasta el alumnado”. En este sentido, subrayó que los valores que se ha formado desde la Academia griega, luego desde las universidades medievales y hasta ahora “son valores que parten de la responsabilidad, de la preparación, de una emulación constante, de un respecto y una encarnación de valores humanos que en el siglo XXI se definen muy claramente a partir de lo que tenemos en común, no sólo los españoles, también los europeos, que son valores de respecto de la dignidad humana, de igualdad de la persona; respeto a las personas por encima de las diferencias, credo, religiones, y luego también por un esfuerzo personal, no solo para poder realizar una vida profesional satisfactoria y completa, sino también como una aportación a la sociedad y a la comunidad”. Asimismo, Barón subrayó que estos valores hay que “defenderlos y afirmarlos”, porque conocimientos científicos y técnicos se aprenden “y se pueden olvidar, pero los valores humanísticos me acompañan”.

Dimisión de Cifuentes

En cuanto a la dimisión de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, por su escándalo del máster de la Universidad Rey Juan Carlos, subrayó que hay distinguir, por un lado, el comportamiento personal de una persona, “que creo que la única respuesta digna es la dimisión y no comprometer a una institución pública. Esta es una norma de comportamiento que siempre he seguido toda mi vida y pienso que es la digna, más que de repartir culpas a los demás y, sobre todo, el condicionar y subordinar a unas instituciones que tienen que estar al servicio de los demás”. En este sentido, señaló que en Madrid, en este momento, el sector más importante de la sociedad y de la economía es la Universidad, con más de 250.000 personas que viven directamente de ellas. “Condicionar el prestigio de la Universidad, de su capacidad, en función de unos intereses personales, no es de recibo”, apostilló. Y, por otro lado, consideró que en política democrática “uno tiene que ser responsable. Está en un servicio público a la comunidad,  no está aprovecharse de lo que puede haber obtenido por diversos medios”.

Tras la conferencia de Enrique Barón se celebró una mesa redonda, en la que participaron estudiantes y egresados, así como profesorado del ámbito de la ética y valores, que permitió un debate con la participación activa del alumnado asistente.

Esta jornada se planteó con el objetivo de reflexionar sobre cuáles son los valores que deben caracterizar al universitario y universitaria del siglo XXI y cuál es la responsabilidad de la universidad pública en el fomento, facilitación y dinamización para que esos valores se desarrollen.

Las jornadas estaban destinadas al alumnado de Grado, Máster y Doctorado de la UJA.

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