El hidrógeno es una realidad energética que promete sustituir a los combustibles fósiles debido a su nulo impacto medioambiental. Este combustible puede ser una fuente de riqueza para Almería. De los aspectos relacionados con el hidrógeno, obtención, almacenaje y aplicaciones y de cómo puede ser una fuente de riqueza para Almería se va a hablar del 17 al 19 de julio en el Curso de Verano ‘Almería: un valle de hidrógeno verde’.
Dirigido por Antonio Romerosa, a través de diferentes ponencias y visitas a instalaciones industriales expertos en hidrógeno desgranarán las propiedades y aplicaciones actuales del mismo. Una especial relevancia tendrán todos aquellos aspectos que puedan contribuir a mejorar la calidad de vida en la ciudad de Almería, y las diversas actuaciones que habrían dee acometerse, así como los beneficios medioambientales y económicos que conllevarían.
En este sentido, el director del seminario ha destacado que Almería será la tercera provincia andaluza en contar con un valle de hidrógeno, tras Cádiz y Huelva. “El valle del hidrógeno verde es una iniciativa de la Junta de Andalucía dentro de la iniciativa de la Unión Europea para crear ecosistemas de hidrógeno en los que se produzca, genere, comercialice y se cree toda la infraestructura relacionada con el hidrógeno verde. Estos tres valles van a tener una especial relevancia porque van a tener ayudas especiales para las empresas que se constituyan y se dediquen a trabajar el hidrógeno, además de ayudas de otro tipo con el objetivo de que se cree la infraestructura necesaria para que las industrias se puedan beneficiar del hidrógeno verde. Tanto la industria pesada y productiva como la creación de hidrogeneras para el transporte en camiones o autobuses y, más tarde, el transporte de particulares”.
Una de las ideas importantes y por lo que se ha creado el valle del hidrógeno verde en Almería es por el impacto que tiene el consumo de combustibles fósiles en la producción de los vegetales. “Pronto la UE, y muchos países ya lo están haciendo, van a poner una tasa o marca de consumo o producción de CO2. Algo que afectará a la provincia. Si bien los vegetales por sí mismos no producen CO2, sino que lo retienen, cualquier tipo de maquinaria que se utilice en su producción que funcione con combustible fósil (gasolina, diesel, etc.) incrementa el consumo de Co2. Además, sólo el hecho de transportar la producción agrícola del invernadero a la cooperativa y de ahí a su destino, incrementa enormemente la tasa de producción de CO2”.
Como consecuencia, “esto puede incrementar el precio del producto, conllevar problemas o que se pueda vetar el producto en un momento determinado. Si toda esa maquinaria funciona con hidrógeno, se evita la producción de CO2 y eso favorece que la producción agrícola de Almería sea más ecológica y no tenga problemas futuros con respecto al incremento o a la producción de CO2 en su producción”.
Se trata de un tema de máxima actualidad y transcendencia que será abordado por expertos en la materia que cuenta con la colaboración de la Fundación Unicaja y la Real Sociedad Española de Química.
Aún quedan plazas para poder inscribirse en este interesante curso, que se desarrollará en el Centro Cultural de la Fundación Unicaja.