Demuestran la alta resistencia a las amenazas de la Gran Barrera de Coral australiana

Un proyecto de investigación internacional en la que participa el catedrático del departamento de Estratigrafía y Paleontología de la Universidad de Granada, Juan Carlos Braga Alarcón, y que ha sido publicada por la revista Nature Geoscience, asegura que la Gran Barrera de Coral de Australia ha superado cinco episodios de alta mortalidad durante los últimos 30.000 años por lo que presenta una gran resistencia a las amenazas provocadas por los cambios.

La Gran Barrera de Coral de Australia ha superado los cambios en el nivel medio del mar y las variaciones climáticas asociadas a los mismos hasta en cinco ocasiones. Así se desprende de esta investigación internacional desarrollada en el marco del “International Ocean Discovery Program” (IODO) y que ha permitido reconstruir la evolución del arrecife más importante del planeta en los últimos 30 milenios, para analizar su respuesta a los bruscos cambios ambientales.

“La Gran Barrera de Coral ha logrado adaptarse a las modificaciones medioambientales gracias a su migración a través del fondo del mar a medida que los océanos subían y bajaban”, explican los investigadores.

La investigación ha demostrado que el arrecife es más resistente de lo previsto a cambios ambientales relevantes, como el aumento del nivel del mar y la temperatura del agua, aunque, por otra parte, ha mostrado una notable sensibilidad a la entrada de sedimentos o el agua de mala calidad.

Los investigadores destacan cómo el arrecife ha superado la última glaciación y deglaciación, pero se preguntan si la capacidad de resistencia de la Gran Barrera de Coral será suficiente para aguantar el actual declive global de los arrecifes.

El estudio ha empleado información geomorfológica, sedimentológica, paleontológica y datos procedentes de testigos de sondeo de arrecifes fósiles en 16 localidades en el NE de Australia. La investigación ha abarcado el periodo anterior al Último Máximo Glacial, hace unos 20.000 años, cuando el nivel del mar estuvo 120 metros por debajo del nivel actual.

A medida que los niveles del mar descendieron en los milenios anteriores a ese tiempo, hubo dos episodios de mortalidad (a unos 30.000 años y 22.000 años atrás) causados por la exposición del arrecife al aire. Durante este periodo, el arrecife se movió hacia el mar para mantener el ritmo de la caída del nivel del mar.

Durante el periodo de deglaciación posterior al Último Máximo Glacial, hubo otros dos episodios de mortalidad en los arrecifes, a aproximadamente 17.000 y 13.000 años atrás, causados por el rápido aumento del nivel del mar. El arrecife se movió hacia tierra, tratando de mantener el ritmo del incremento del nivel del mar.

El análisis de las muestras de testigos y los datos sobre el flujo de sedimentos muestran que estos eventos de muerte con el nivel del mar en aumento probablemente estuvieron asociados con altos incrementos en la sedimentación. El último episodio de muerte del arrecife, hace unos 10.000 años, antes del surgimiento del arrecife moderno hace unos 9.000 años, no se relaciona con ningún aumento abrupto del nivel del mar o “pulso de agua de deshielo” durante la deglaciación. Más bien, parece estar asociado con un incremento masivo de sedimentos y una reducción de la calidad del agua junto con un aumento general en el nivel del mar.

Los autores proponen que el arrecife ha sido capaz de restablecerse a lo largo del tiempo debido a la continuidad de los hábitats de corales y algas coralinas arrecifales y a la capacidad del arrecife de migrar lateralmente entre 0,2 y 1,5 metros por año.

Sin embargo, los científicos aseguran que es poco probable que esta tasa sea suficiente para sobrevivir a los ritmos actuales de aumento de la temperatura de la superficie del mar, disminuciones bruscas en la cobertura de coral, decoloración de coral año tras año o disminución de la calidad del agua y aumento del flujo de sedimentos. “Tenemos serias preocupaciones sobre la capacidad del arrecife en su forma actual para sobrevivir al ritmo del cambio causado por las tensiones actuales y las proyectadas en el futuro cercano”, afirman.

Estudios previos han establecido un aumento de la temperatura de la superficie del mar en el pasado de dos grados en un periodo de tiempo de 10.000 años. Sin embargo, las previsiones actuales de cambio en la temperatura de la superficie del mar son de alrededor de 0,7 grados en un siglo.

“Nuestro estudio muestra que además de responder a los cambios en el nivel del mar, el arrecife ha sido particularmente sensible a los flujos de sedimentos en el pasado y eso significa que en el periodo actual debemos comprender cómo las prácticas de la industria primaria están afectando a la entrada de sedimentos y la calidad del agua en el arrecife”, concluyen los investigadores.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.