El amor a la ciudad que le ha acogido, Almería, y a una mujer, Natalia, son el hilo conductor del nuevo poemario que Alexis Díaz Pimienta presentó en Roquetas de Mar, y que inaugura una colección de poesía de la editorial recientemente creada Scripta Manent.
Alexis Díaz Pimienta es un cubano que lleva unos quince años viviendo en Almería. Es uno de los poetas cubanos contemporáneos más destacados, y ahora presenta una reedición de la ‘En Almería casi nunca llueve’, una obra publicada por primera vez hace catorce años y que vendió 500 ejemplares en España y 10.000 en Cuba.
El amor a una ciudad andaluza (Almería) y a una mujer (Natalia) son el hilo conductor de este poemario con el que Alexis Díaz recibió en 1996 el prestigioso Premio Internacional de Poesía ‘Surcos’ en Coria del Rio, en Sevilla, editado entonces por Quasyeditorial y reeditado varios años después en La Habana. Es un libro de poemas de amor, pero también un himno de nostalgia por La Habana, por Almería, por Natalia; un libro en el que la lluvia deja de ser un fenómeno natural para convertirse en una realidad ‘meteoerótica’, causa y efecto de una pasión intensa.
Por su parte, Alexis Díaz Pimienta explicó que “cuando llegue a Almería en 1993 en Almería casi nunca llovía. Ahora cuando uno se enamora de una mujer, es que llueve mucho, y quisiéramos que no escampe. La lluvia de este libro es algo metafórico, la lluvia de este libro es de emoción y sensaciones. Cuando yo llegué a Almería yo tenía más pelo, pero me encontré con unas montañas desnudas, cuando yo venía de un país verde. Me sorprendió el desierto de Tabernas y el parque natural de Cabo de Gata”.
Pimienta explicó que “después de agotarse este libro en dos ocasiones, me hacía ilusión que se volviera a reeditar, y ahora cuando ha salido, parece que en Almería ya si llueve. Cada vez que leo este libro, siempre llueve”. La parte final de la intervención consistió en la lectura de poemas a cargo de Díaz Pimienta. Aunque el final fue apoteósico puesto que ante una sala repleta de público, Alexis Díaz sacó a relucir su faceta como repentista, dejando a todos alucinados.
