La Consejería de Empleo, Universidades, Empresa y Medio Ambiente de la CARM ha anunciado su intención de hacer una caracterización de la calidad del aire en las zonas mineras en relación a los metales pesados. El primero de estos estudios se llevará a cabo en la diputación cartagenera del Llano de Beal.
La Dirección General de Medio Ambiente y Mar Menor está ultimando el pliego para la contratación de un estudio que tendrá un año de duración y que supondrá la contratación de campañas de medición de metales pesados en la zona que tengan como objetivo principal la caracterización de la calidad del aire local en el entorno de la Sierra Minera comenzando por el Llano de Beal.
La zona será cubierta por un número de puntos de medición fija de acuerdo con las densidades de emisión, los patrones probables de distribución de contaminación ambiental y la exposición potencial de la población, por lo que la definición de la red de medición se realizará en colaboración con Salud Pública, y sobre la base de los estudios centinela y epidemiológicos que se vienen realizando.
La campaña de medición contemplará al menos los contaminantes de mayor incidencia ambiental generados por la extinta actividad minera, como plomo, arsénico y cadmio, bien por la cantidad en la que se estiman, bien por la peligrosidad que presentan o bien por el especial interés ambiental que la normativa ambiental o documentos reconocidos le atribuyen.
“Para el desarrollo de la campaña de medición se requerirán los métodos de referencia para la toma de muestra y análisis en materia de calidad del aire establecidos en la normativa y teniendo en cuenta los condicionantes topográficos, meteorológicos, y naturaleza fisicoquímica del aire de la zona”, indicó el director general de Medio Ambiente y Mar Menor, Antonio Luengo.
Asimismo, el pliego en elaboración exigirá garantía de la trazabilidad de todas las mediciones y de que se efectúan de conformidad con los requisitos establecidos en la norma armonizada aplicable a los laboratorios de ensayo y calibración, es decir, la Norma UNE-EN ISO/IEC 17025: ‘Evaluación de la conformidad. Requisitos generales para la competencia de los laboratorios de ensayo y de calibración’.
“Este estudio ha surgido de la reunión del grupo de trabajo Sectores de áreas sensibles, información y sensibilización y estudios que se constituyó en el seno de la Comisión de Seguimiento del Plan de Mejora de la Calidad del Aire de la Región de Murcia 2016-2018 en el que se presentó la propuesta de mejora de infraestructuras de la Red de Vigilancia de Calidad del Aire”, puntualizó Luengo.
Metales pesados
La Red Regional de Vigilancia de la Calidad del Aire se divide en seis zonas de evaluación de la calidad del aire, con un total de ocho estaciones fijas y dos móviles. Adicionalmente, las mediciones se complementan con campañas que se realizan en zonas concretas, para evaluar la ubicación de las estaciones actuales y revisar la zonificación establecida, en aplicación de las medidas del Plan Regional de Mejora de la Calidad del Aire.
En la actualidad, la estación de Mompeán (Cartagena) dispone de captador de partículas Pm10 para la determinación de metales pesados y es representativa de la zona única de la Región de Murcia.
Los resultados de esta campaña en el Llano del Beal y sucesivas en el entorno de la Sierra Minera complementará los datos que se introducen desde las estaciones de manera automática en el sistema de pronóstico y diagnóstico de la calidad del aire, lo que permitirá contar con mayor información para la toma de decisiones por parte de las diferentes administraciones competentes a la hora de priorizar las actuaciones en el entorno de la Sierra Minera, cuyo marco será el Plan de Recuperación de Suelos Afectados por la Minería.